Aseguran que Fernández no volverá a la Policía Local
Desde hace 10 días, el titular de esa fuerza está “de vacaciones”. Desde el Gobierno informaron que “tiene un familiar muy enfermo”, aunque dentro de Palacio hubo quienes se sintieron aliviados con su partida. Entre los agentes, aunque no lo denunciaron, hay versiones de que habría cometido irregularidades.
No llegó a dos cuatrimestres la gestión del subcomisario Adrián Gonzálo Fernández al frente de la Policía Local. Hace diez días pidió licencia “por vacaciones”, pero fuentes consultadas por La Opinión en el Gobierno municipal y en el Ministerio de Seguridad confirmaron que no hay retorno.
Oriundo de Capital Federal, Fernández está radicado en Moreno, al oeste del conurbano. Vicente López y Pilar fueron destinos de este subcomisario que a los 43 años arribó a San Pedro para reemplazar a Gabriela Lencina, la conductora del proceso de formación de la Policía Local.
La salida de Fernández fue silenciosa. Pero una serie de hechos aturdió a quienes estaban a su alrededor a raíz de la acumulación de quejas informales que fueron pasando de agente en agente y llegaron al Palacio Municipal.
Para evitar denuncias que podrían sonar a escándalo y rozar al Gobierno, le recomendaron que se tome “vacaciones de esas de las que no se vuelve”.
La versión oficial
“Sacó vacaciones por problemas personales”, informó a La Opinión el director de Coordinación de Policías de la Municipalidad, el comisario retirado Juan Carlos Agüero, consultado sobre la licencia de Fernández.
“Pueden pedir hasta 45 días, pero todavía no tengo el número exacto”, dijo Agüero sobre la licencia del titular de la Policía Local, solicitada porque tiene “un familiar muy enfermo” y quiere abocarse al tema, agregó el funcionario.
En su lugar fue designada la oficiala subinspectora Laura Lencina, hermana de quien fuera coordinara de la academia, y que ocupaba el puesto de segunda de Fernández.
En estricto off the record, uno de los hombres más importantes de la estructura del gobierno de Cecilio Salazar confió que tuvieron que apurar la salida del subcomisario, “antes de que todo eso se volviera un quilombo”.
Con “todo eso” se refería a las múltiples historias que se contaron en los últimos meses con el subcomisario Fernández como presunto protagonista y que, aseguran, explotaron en la mesa del intendente luego del San Pedro Country Music Festival.
“El que se queja…”
Cuando asumió, a fines de febrero, Adrián Fernández ofreció una entrevista a La Opinión en la que fue consultado acerca de los reclamos de vecinos que no veían con buenos ojos que los agentes de la Policía Local encabezaran procedimientos aleatorios e interceptaran todo el tiempo a personas en la calle para identificarlas.
“El que se queja es porque tiene algo que ocultar”, había asegurado en esa oportunidad. Las quejas sobre su propia actuación empezaron a crecer dentro de la propia fuerza, aunque hasta donde pudo averiguar La Opinión, todavía no había denuncias formales.
A oídos de funcionarios del Gobierno llegaron las mismas versiones que fueron relatadas a este medio. Muchas fueron narradas por oficiales de la Policía Local que, temerosos de represalias, prefirieron no dar sus nombres.
En el Gobierno aseguraron que habría en marcha una instancia para que Asuntos Internos tome cartas en el asunto.
Los hechos que se le endilgan son múltiples y revisten distinta gravedad. Desde presuntos casos de acoso a las agentes mujeres, pasando por “retenciones indebidas” que habrían sufrido algunos oficiales en el pago de sus horas adicionales, hasta la “colaboración” de comerciantes a cambio de presencia policial en la zona de sus locales, algo que fue confirmado por algunos de ellos, que aseguraron que, en efecto, habrían “colaborado” –ese fue el término que utilizaron– con la Policía Local “por su buena voluntad”.
El intento de “protección” hacia una agente que chocó a un motociclista, huyó de la escena y escondió el auto –con la que tendría, según cuentan en la fuerza, “una relación cercana” – también habría sido parte del enojo de los funcionarios con Fernández.