Arranca la construcción del barrio en la ex Arco de Oro
Después de las dudas y la incertidumbre por parte de la empresa San Pedro Crece, ante la falta de apoyo municipal en pedidos concretos que se habían realizado, se lanzó la obra para construir 132 casas en los terrenos de la Planta Arco de Oro, que se remataron en el 2003. La primer tarea la realiza Obras Públicas para demoler lo existente tras una orden judicial, y luego se marcarán las calles para su apertura.
Este lunes los vecinos de la ex fábrica Arco de Oro comenzaron a detectar movimientos muy positivos en los terrenos que fueron rematados hace ya dos años y que adquirió una empresa con la finalidad de construir un barrio. Algunas máquinas comenzaron a trabajar para demoler las últimas paredes que quedaban en pie de las viejas instalaciones, y a limpiar los terrenos porque finalmente se comenzarán a edificar viviendas que le cambiarán para siempre el aspecto a esa zona.
La primer tarea, igualmente no fue dispuesta por la empresa propietaria sino por Obras Públicas, porque según confirmó el Arquitecto Flavio Peiró recibieron un oficio judicial donde un juez indicaba a la municipalidad que se ocupara de demoler todas las estructuras como respuesta a una intimación iniciada tras las denuncias de varios vecinos por los peligros que el lugar encerraba para niños y personas que por allí deambulaban.
Esta demolición, según explicó Peiró, igualmente se realiza con costas a los dueños del terreno que luego deberá abonar los trabajos.
Pero según algunas reuniones mantenidas entre el funcionario y responsables de la empresa, la obra de construcción comienza en estos días porque en el transcurso de esta semana el arquitecto a cargo, presentaba los planos correspondientes para ser aprobados por el área.
Ayer martes, las tareas de demolición terminaban y la actividad continuaba en manos de un agrimensor sampedrino encargado de medir la totalidad de las manzanas que serán destinadas a la construcción de un total de 132 casas.
Por etapas
Aunque la obra se inició casi en silencio, y la empresa propietaria no ofreció por el momento demasiados detalles, sí se confirmó que la intención es cumplir una primera etapa de 18 casas, y una vez terminadas y vendidas, se arrancaría con una segunda similar, hasta concluir las 132 en un lapso no mayor a un año y medio.
El proyecto y seguimiento de la obra está a cargo del Arquitecto Marcelo Pérez, de Capital Federal, el mismo que tuvo la responsabilidad de refaccionar el viejo Hotel Obligado para convertirlo en el Howard Johnson. Para la puesta en marcha se contrató a una constructora foránea, que de todas maneras contrataría mano de obra local por lo que la noticia es doblemente buena para los sampedrinos. Por un lado, los vecinos se verán beneficiados al desaparecer las ruinas de la ex fábrica que provocaban quejas por la suciedad, y por otra parte se abrirá una nueva oferta laboral. Antes de demarcar los lotes y edificar, la municipalidad tendrá una tarea importante a realizar como lo es la apertura de las calles que dividirán las manzanas. Peiró confirmó que el pedido por parte de la empresa ya se hizo y que la motoniveladora municipal pasará para demarcar las tres calles. Por el momento, no hay pavimentación prevista para el nuevo barrio aunque sería una gestión que podría iniciarse a la brevedad. Sí se comenzaron a tramitar los servicios públicos como la extensión de red de gas, luz y cloacas, fundamentales al terminar la obra.
Después de un período de tiempo en el que la firma propietaria hasta había amenazado con vender los terrenos justamente por la falta de apoyo de la municipalidad en algunos pedidos concretos que se habían realizado, la noticia causó sorpresa y alegría porque significará la posibilidad de cambiarle cara a un sector clave ubicado en uno de los accesos principales de la ciudad. Tal vez, esa foto editorial publicada por La Opinión, haya puesto en marcha el engranaje.