Arranca el juicio por el asesinato de Rubén Pérez
Será hoy desde las 8 hs. en los Tribunales de la ciudad de San Nicolás. Declararán 30 testigos, y Andrés Lafuente, único imputado como presunto autor del hecho.
En el día de hoy se pondrá en marcha el juicio oral y público por el asesinato de Rubén Pérez. Un caso que trascendió en la ciudad por tratarse de un conocido vecino y propietario de una tradicional casa de electricidad.
El asesinato del comerciante se produjo en la noche del martes 7 de Diciembre de 2004, por motivos que comenzarán a conocerse desde la mañana de hoy. La causa fue investigada por la Fiscalía Nº 3 a cargo del Dr. Vicente Botteri y está caratulada como “homicidio”. Sólo una persona, Alberto Andrés Lafuente, mayor de edad y domiciliado en Caseros 1195, está procesado y detenido como presunto autor del hecho.
En total son 30 los testigos citados a declarar. Entre ellos figuran familiares, amigos, profesionales y hasta los parroquianos de un bar, que sin haber observado directamente el incidente, vieron merodear el auto por la zona.
La Presidente del Jurado será la Dra. María Belén Ocariz; oficiarán como jueces las Dra. Laura Fernández y el Dr. Jorge Baldarenas; mientras que la Secretaria será la Dra. Albertina Dávila.
Lafuente es patrocinado por el defensor oficial Dr. Pablo Pratti.
Además, al imputado se lo vincula a otra causa por amenazas y lesiones, producidas antes de la muerte de Pérez. Es decir que el juicio que comienza hoy será unificado y a Lafuente, si se lo condena, será por ambos casos.
Todo está pactado para que empiece y termine hoy, pero si se extiende más de lo debido, los alegatos se leerán mañana jueves.
Noche trágica
Como se recuerda, Rubén Pérez ingresó a la guardia del Hospital desvanecido, y en un primer momento se creyó que se trataba de un inconveniente cardíaco. Minutos después, lograron establecer que tenía un pequeño orificio debajo del brazo, producto de un disparo de arma de fuego que había recibido y que más tarde le produjo la muerte.
Alrededor de las 21 horas, el Ford Falcon celeste que conducía Pérez, impactó contra la pared de una vivienda ubicada en Aníbal de Antón al 1700. Según versiones, se escuchó una fuerte acelerada y el choque contra la casa. Aparentemente, el rodado venía por Caroni y dobló repentinamente hacia Aníbal de Antón ya sin control. Fue auxiliado de inmediato por los vecinos, entre ellos la propietaria de la vivienda, la Dra. Silvana Morales.
Con el correr de las horas se fueron conociendo detalles de lo que había ocurrido, y la causa fue tomando otro perfil, se trataba de un homicidio. Por este caso, dos días después, en el domicilio de Caseros 1195 se realizó un allanamiento donde fue detenido Alberto Lafuente.
A partir de allí comenzaron a tejerse un sinfín de cuestiones por las que habría sido asesinado Pérez. Sólo sirvieron para sumar más dudas a una causa que no tuvo una versión oficial, ni la familia de la víctima supo con certeza lo que ocurrió. “Sólo las versiones de los medios”, aseguraron.
En su primera declaración, a las pocas horas de haber sido apresado, Lafuente, habría indicado que no tenía nada que ver con el caso, que esa noche se encontraba en otro lugar. Por su parte, los investigadores descartaron desde un principio la hipótesis del robo, todo indicaría que se trató de un caso pasional.
De todos modos, quedan algunos puntos por establecer y se irán aclarando a medida que avance el juicio. Por ejemplo, en qué lugar se produjo el hecho, si el disparo fue a corta distancia, cuantas cuadras transitó Pérez herido, que hacía Pérez allí y por qué le dispararon. En caso de comprobarse que fue Lafuente el que disparó, también habrá que saber por qué. Finalmente, cuando se lea el veredicto, se abrirá la posibilidad de saber qué fue lo que ocurrió en la noche del 7 de Diciembre de 2004.
Antecedentes
Alberto Lafuente cuenta con varios antecedentes. Hace unos años fue condenado por robo calificado, cometido junto a otras cinco personas, aunque ya había cumplido su pena. También Lafuente había sido detenido unos meses antes del homicidio de Pérez, sospechado de ser parte de dos asaltos que ocurrieron en una panadería y en la zona rural, pero recuperó su libertad porque no se pudo comprobar su responsabilidad. Después fue detenido por su probable participación en el asesinato del comerciante y desde aquel momento nunca más recuperó la libertad.