Apareció una yarará en el Paseo Público: recomendaciones para evitar accidentes
Un ejemplar de yarará fue avistado este lunes por la tarde en la zona donde estaba emplazado el muelle, sobre la orilla del riacho. "Estabamos sentadas ahí, y pasó por al lado de la mano, sentí ruidito", explicó una joven que envió una fotografía de la víbora. El jefe del Departamento de Bromatología, Saverio Gutiérrez, confirmó que se trata de la especie venenosa. Qué precauciones tener para evitar accidentes, en esta nota.
Este lunes, en horas de la tarde, una joven dio aviso a La Opinión de la aparición de una víbora en la zona del Paseo Público donde estaba emplazado el muelle, que fue desmantelado, y donde comienza un sendero que se adentra en la vegetación, bordeando la orilla del riacho.
"Estabamos sentadas ahí, y pasó por al lado de la mano, sentí ruidito", relató la chica, que pudo tomar algunas fotografías antes de que el animal desapareciera. Con ese registro, el jefe del departamento de Bromatología, Saverio Gutiérrez, confirmó a este medio que se trata de una especie venenosa.
Al comenzar la época cálida del año, son más frecuentes de hallar. La yarará o víbora de la cruz es la única serpiente de la región que puede ser mortal para el ser humano. Para reconocerla, es necesario observar que en su cabeza posee una característica "y" o cruz. Además, a lo largo de todo su cuerpo, posee dibujos en forma de tubo de teléfono o riñon.
¿Cómo evitarlas y qué hacer si encontramos una? Mirá este video informativo de San Pedro Naturaleza.
- Mantener áreas libres de malezas en los espacios por donde transitan personas.
- Manejar la basura que producimos: la acumulación atrae roedores; que a su vez atraen a las serpientes porque son controladoras naturales de roedores, potenciales transmisores de enfermedades para el humano.
- Evitar la acumulación de maderas y escombros.
- No matar a sus predadores naturales, tales como lechuzas, garzas, caranchos, cigüeñas y culebras.
- Usar botas o polainas de cuero o goma gruesa en pastizales y humedales, además de guantes o palas para remover escombros o leña.