Analizan un posible caso de Fiebre Hemorrágica Argentina
El domingo por la mañana el Hospital San Pedro derivó al Instituto Maiztegui de Pergamino a una paciente de 24 años con síntomas similares a los de la Fiebre Hemorrágica Argentina. Si bien los análisis aun no confirmaron que se trata de la enfermedad comenzó a ser tratada con la medicación que se dispone para estos casos. Los médicos indicaron que su cuadro no era grave y que se aguarda su recuperación favorable. La presunción instala con mayor fuerza la información preventiva.
El sábado a las 23:45 una joven de 24 años ingresó a la guardia del Hospital manifestando que desde hacía algunos días presentaba fiebre y fuertes dolores en las articulaciones y que vinculaba estos síntomas con un estado gripal. Inmediatamente los médicos comenzaron a asistirla y solicitaron análisis monitoreados que permiten contrastar los resultados y la evolución en cuestión de horas. A las 7 de la mañana del día domingo, los facultativos solicitaron una derivación urgente al Instituto Maiztegui de la ciudad de Pergamino, argumentando que la sumatoria de síntomas y los resultados de los estudios practicados, hacían sospechar que se estaba ante un nuevo caso de Fiebre Hemorrágica Argentina.
El Jefe de la Guardia del Hospital indicó que la joven fue trasladada compensada y que su estado no era grave lo que presupone que con el tratamiento adecuado su recuperación sería favorable.
La joven vive en el radio urbano de la ciudad y según se indicó desde el Hospital, trabaja en las oficinas de un galpón de empaque. Ante la persistencia de fiebre, dolor de cabeza y musculares, decidió hacer una consulta en la guardia.
En Pergamino se le practicaron los estudios de rigor que antes del fin de semana determinarán si se está ante un nuevo caso de la enfermedad que también se conoce como Mal de los Rastrojos. Mientras tanto comenzó a ser medicada preventivamente y se aguarda su evolución favorable que al término de unos días le permita regresar a su hogar.
Los síntomas de esta enfermedad son similares a los que puede presentar una persona que ha contraído Hantavirus. La forma de contagio y los síntomas son similares pero no así su tratamiento por lo que se aconseja realizar consultas médicas a la brevedad para estudiar la evolución de la persona afectada y poder realizar la derivación a centros específicos para cada una de las patologías.
La enfermedad
La Fiebre Hemorrágica Argentina, es una enfermedad infecciosa de origen viral, cuyo agente causal es el virus Junín y San Pedro se encuentra dentro de la zona endémica. El virus Junín tiene como reservorio a especies de roedores silvestres – Calomys musculinus y Calomys laucha. El roedor elimina el virus al medio ambiente a través de la saliva y de la orina y así esparce la enfermedad por todos lados donde se moviliza. El virus llega al hombre mediante distintas vías: una herida en la piel, un objeto contaminado en la boca, o las hierbas contaminadas llevadas por el viento pueden entrar en contacto con la boca, ojos o nariz. Tiene un periodo de incubación que oscila entre los 6 y 14 días. Los síntomas más comunes son estado febril constante, decaimiento general, dolores musculares, de cabeza y detrás de los ojos, perdida del apetito y dolores abdominales. Al cabo de 5 días las manifestaciones se intensifican y pueden aparecer mareos, nauseas, vómitos y un fuerte dolor en la región lumbar. El tratamiento se basa en la administración de plasma de personas que han padecido esta enfermedad (plasma inmune), el cual aplicado dentro de los primeros 8 días de la evolución del cuadro, reduce la mortalidad del 40 % a menos del 1%.
Este tipo de tratamientos permite neutralizar el virus Junín en la sangre disminuyendo la duración del periodo febril y la intensidad de todos los síntomas y la posibilidad de contraer otras infecciones bacterianas. El suero que se aplica tiene anticuerpos que, al ser inyectados al enfermo, actúan sobre el virus inactivándolo y reforzando la producción de nuevos y mas anticuerpos.
La disponibilidad de plasma es limitada y depende de la donación que puedan hacer las personas que hayan padecido de Fiebre Hemorrágica y que hayan curado luego del tratamiento. La enfermedad puede tener tres tipos de derivaciones: nerviosa, hemorrágica o mixta. La primera afecta centros nerviosos motrices que producen en el paciente una incoordinación de movimientos y temblores en las manos y la lengua. La segunda afecta los vasos sanguíneos lo que provoca hemorragias de gravedad. La mixta combina las dos anteriores. Ante cualquiera de estos cuadros, siempre y cuando sea detectado a tiempo, el paciente puede recuperarse. También se aplica de manera preventiva la vacuna Candid 1 que ha demostrado su eficacia.