Alertan sobre casos de diarrea por un rotavirus
En el Hospital se atendieron varios niños con este cuadro. Hubo un caso fatal pero los médicos dicen que el cuadro estaba avanzado cuando recibieron al chiquito, que se encontraba deshidratado. Las medidas preventivas son estricta higiene y consultar inmediatamente al pediatra ante la aparición de diarrea y fiebre.
En el área de pediatría del Hospital falleció la semana pasada un chiquito de tan sólo ocho meses de edad, tras ingresar con un grave cuadro de gastroenteritis.
La jefa del servicio informó que el menor ingresó con fiebre y diarrea en la noche del lunes, pero que según refirieron sus padres el cuadro había aparecido el domingo, cuando el chiquito comenzó a sufrir diarreas y fiebre. Una vez en el Hospital, fue internado rápidamente pero falleció dos horas después producto de una fuerte deshidratación. Aunque se trataba de un chiquito nacido en término y con buen peso, los médicos explicaron que la demora en recibir un tratamiento adecuado fue lo que determinó el desenlace fatal y por eso alertaron a los papás sobre la aparición de estos cuadros graves. El niño era el hijo único de una joven pareja, y era atendido en el Centro de Salud 1º de Mayo. La última consulta había sido realizada el día 23 de Mayo, hasta el lunes de la semana pasada, cuando el pequeño ingresó en muy mal estado.
El origen de este cuadro infeccioso agresivo, sería los denominados rotavirus, que afectan sobre todo a niños menores de dos años, y que son la causa más común de diarrea grave. Es sumamente contagioso, y la preocupación más grande es evitar la deshidratación como resultado del exceso de pérdida de fluidos.
En el Hospital local se han atendido varios casos en lo que va del año, pero los médicos explican que ninguno resultó grave porque al ser tratado a tiempo son controlados rápidamente.
Medidas de prevención
El bebé puede contagiarse con el rotavirus en cualquier época del año, pero es mucho más frecuente de noviembre a abril. El virus generalmente se adquiere cuando el niño se lleva los dedos a la boca después de tocar algo contaminado con las heces de una persona infectada.
Los síntomas son diarrea líquida, fiebre, náuseas y vómitos. Las náuseas y la fiebre por lo general desaparecen en unos dos días, pero la diarrea puede durar hasta siete días. Los antibióticos no son efectivos contra una infección por rotavirus y por eso lo importante es evitar la deshidratación. Los pacientes pueden contraer la infección más de una vez, aunque luego tienden a ser más leves.
La primera medida a tomar por los padres, por supuesto es llamar o concurrir al médico inmediatamente, ante la aparición de diarrea líquida, náuseas o vómitos, o si tiene menos de tres meses de edad y tiene fiebre alta.
En cuanto a la deshidratación, deben controlar si el niño no ha mojado los pañales en más de 5 horas, tiene la boca seca, no tiene lágrimas cuando llora, o tiene un lugar blando y hundido en la parte superior de la cabeza o los ojos hundidos.
Por supuesto, la higiene es fundamental. Por eso los médicos indican que los adultos deben lavarse las manos continuamente antes de tocar a los bebés, y sobre todo después de cambiar sus pañales, hervir el biberón o mamadera después de darle la leche, y en los casos de niños que ya comen por sí solos, controlar los alimentos y el agua que consumen, y que podrían estar infectados con el virus.