Alerta por los precios para los turistas
Los turistas pagarán por elegir San Pedro entre un 20 y un 30 % más que en la temporada anterior. La Secretaría de Producción y Turismo pidió a los prestadores de servicios que facilitaran los costos que manejarán en este verano. Sólo cuatro empresas contestaron. La Opinión Semanario, constató que los precios aumentaron ese porcentaje.
El pasado 3 de Diciembre, hace casi un mes, el área que dirige Norberto “Cachi” Atrip, envió un correo electrónico a las empresas que prestan algún tipo de servicio a los turistas, para conocer las tarifas orientativas de lo que será esta temporada. Este pedido corresponde a una solicitud que realizó el Departamento de Información Turística que depende de la Secretaría de Turismo de la Provincia de Buenos Aires, con el objetivo de armar un mapa amplio de la oferta del territorio bonaerense. Sin embargo hasta el momento la Secretaría local no ha podido cumplir con el pedido, ya que fueron solamente cuatro los que han contestado a esa inquietud. “Puede ser un error nuestro” dijo Atrip, quien además comentó algunos aspectos de la política que pretende aplicarse al sector.
Lo entregado y averiguado
La información que fue pedida, era clara y concisa con respecto a cada una de las distintas categorías de alojamiento. En nuestra ciudad, ingresaba hotelería, que debía detallar los precios en base doble y single, en hoteles de 1 a 5 estrellas, por lo que sólo contestó hasta el momento el Hotel Esser. Tres por otra parte fueron los bungalows que mandaron la información correspondiente, siendo el “La Casona de Alex”, “Pa ’ Dormir” y “Establecimiento Esperanza”. Los cuatro mantuvieron precios de entre $ 76 y $ 329, dependiendo la cantidad de personas y servicios del lugar, ya que prácticamente todos incluyen el desayuno, pero se diferencian por la pileta, aire acondicionado, etc.
La Opinión por su parte pudo saber que algunos de los campings fueron los que más incrementaron el costo para el alojamiento en comparación con la temporada anterior.
Fuera de los alojamientos, uno de los principales problemas tienen que ver con la gastronomía y menús turísticos. Según admitieron desde la Secretaría, en el libro de quejas (que usan como termómetro), los turistas se ofuscan mucho no sólo por los precios, sino además por las comidas, debido a la lentitud de entrega y servicio. En este aspecto, los comercios de la costa, son los que más han variado su tarifa, según manifiestan como consecuencia de la inflación en la materia prima. “Tenemos que hacerles ver que no pueden cobrar por un servicio que no tienen” dijo el Secretario de Turismo local al respecto.
Año difícil, viveza criolla
“Este año fue muy complicado, los números no dieron igual que en la temporada anterior” comentó el dueño de un kiosco cercano a la costa. El humo, los accidentes, la niebla, los paros fueron algunos de los factores que hicieron que el turismo decayera un poco durante el transcurso del año, incluso no siendo tan fuerte en fechas de feriados largos, o por ejemplo en unas olvidables vacaciones de invierno.
Estas situaciones causaron que algunos de los prestadores abusaran de los precios en fechas claves, como los fines de semana largo o la llegada de La Renga, donde se llegó a cobrar $ 10 una botella de Coca-Cola.
“Es muy tentador hacer dinero ahora, pero no bueno. Si viene gente sólo por la moneda de cambio cuando baja no viene más. Si nuestro capital es la naturaleza, el modo social, la comida… la debemos cuidar en relación armónica precio y calidad” dijo Atrip, a lo que agregó “buscamos ese camino, copiando de otras ciudades que tuvieron éxito, que el turista vuelva”.
Resulta preocupante la metodología utilizada para el relevamiento. Más que un correo electrónico haría falta una recorrida para establecer la dimensión que tienen las decisiones tomadas por los prestadores respecto a los precios y sus políticas de atención. Con los aumentos constatados por La Opinión y las deficiencias que se denuncian en las casillas de turismo, las consecuencias pueden ser sumamente graves.