Aguardan “medidas ejemplificadoras” de la Justicia tras dos usurpaciones en Río Tala
El viernes tomaron un terreno municipal y el sábado uno privado. Autoridades gubernamentales denunciaron en la Fiscalía, al igual que el dueño del otro predio. Acusado, el Delegado Diego Macenet quiere acelerar su partida, que había anunciado hace un mes, aunque no presentó la renuncia. La localidad celebró su aniversario y el campeonato de fútbol en medio de esta situación. Pobreza, delincuencia y peligrosos contactos con Rosario, la “Medellín argentina”.
En cuatro meses de Gobierno, Giovanettoni ya lleva sobre sus espaldas varias tomas masivas de terrenos por parte de familias que, nadie lo niega, sufren como tantas otras la imposibilidad del acceso al techo propio y encuentran en la intrusión de predios públicos o privados la forma más fácil y rápida de satisfacer un derecho que el Estado no puede cumplir y un deseo que el mercado alimenta pero aleja cada vez más.
Este fin de semana, dos usurpaciones tuvieron lugar en Río Tala, teñidas de graves acusaciones al Delegado Diego Macenet, quien manifestó una vez más su deseo de irse del cargo.
El viernes, alrededor de 20 familias ocuparon un terreno municipal que esperaba una ordenanza de venta para favorecer a familias sin techo, una idea que se puso sobre sus hombros el hermano del Delegado, Adrián Macenet, cuando fue concejal y Secretario Legislativo, pero que el Ejecutivo nunca hizo avanzar.
El sábado, alrededor de 50 personas se metieron en un predio privado cuyo titular radicó la denuncia correspondiente, tal como había hecho el día anterior el Secretario de Gobierno Martín Baraybar en nombre de la Municipalidad.
En el primero de los casos, Diego Macenet fue acusado de “autorizar” la toma y además fue señalado como artífice de prácticas similares en otras oportunidades, “siempre y cuando le guardes un terrenito para él”, según dijo en diálogo con La Opinión una de las mujeres que tomaba el terreno.
A la espera de la Justicia
Tras las denuncias, en el Gobierno municipal esperan que la Fiscala Gabriela Ates tome medidas de instrucción rápidas y eleve cuanto antes al Juzgado de Garantías interviniente la solicitud de restitución del bien, lo que implicaría el desalojo de los ocupantes de los terrenos, una decisión que entienden sería “ejemplificadora” para evitar que la campaña electoral que se viene tenga este tipo de situaciones como parte del juego sucio de la política.
Ates solicitó a la Policía que haga un relevamiento e informe identidades y situación de las personas que están ocupando propiedad ajena. El Gobierno dejó el tema en manos de la Justicia y hasta el terreno sólo se acercaron Macenet y Baraybar.
En Río Tala se dicen muchas cosas respecto a las tomas de estos predios. Hay acusaciones cruzadas y todos coinciden en que las familias que intrusaron tienen necesidad de vivienda pero que las tenían medianamente satisfechas, dentro de las propias carencias que las afectan.
“Los terrenos ya tienen precio. Los valores van desde los 3 a los 7 mil pesos”, dijo un vecino de Río Tala. En la localidad había preocupación por un predio lindero al municipal, comprado por un grupo de familias en forma cooperativa, “con mucho esfuerzo, gente trabajadora”, dijo Macenet, preocupado.
Ese grupo de talenses montó guardia para evitar que les usurpen el terreno y en medio de ello fueron amenazados con armas de fuego de grueso calibre de las que incluso habrían salido disparos al aire. En el pueblo muchos se preguntaron cómo llegaron esas armas y quién las proveyó. “No valen dos pesos”, señalaron.
Macenet se quiere ir
El Delegado de Río Tala se hizo presente el viernes en el lugar, donde recibió insultos y todo tipo de acusaciones, las que negó en su totalidad. Todo ello provocó que cuando Baraybar fue a la localidad, Macenet le recordara lo que le había comunicado hace un mes al intendente: que le buscaran un reemplazo porque él “no daba más”.
El Gobierno le pidió que no tome decisiones en caliente y en medio del conflicto, pero para el Delegado parece tema resuelto. Aun así, hasta ayer no había presentado su renuncia formal, aunque tampoco se presentó a trabajar ni a acompañar el operativo DNI, así como tampoco se lo vio en ninguna actividad oficial para la celebración de los 102 años del pueblo.
Sí se lo vio muy activo en relación al campeonato de fútbol que le dio el triunfo a Las Palmeras, club local del que fue dirigente y donde el viernes mismo de la toma, en medio de lo que él llamó “una profunda depresión” que incluso lo llevó hasta las lágrimas, asistió a comer un lechón con amigos en la víspera de lo que sería la final del domingo ante Paraná (ver Deportivo).
En el Ejecutivo pensaron en Mauricio Preiti como reemplazo, pero el recientemente asumido concejal no dejará la beca de la banca en el HCD para meterse en el barro de una gestión donde no se puede hacer mucho más que recibir insultos por parte de vecinos insatisfechos.
En ese marco, uno de los que podría ser convocado es el exsecretario de Desarrollo Humano Gustavo Díaz, quien ya fue Delegado de la localidad.
Llegando “los monos”
En Río Tala en el último año pasaron muchas cosas. Accidentes memorables, un tornado que devastó el pueblo, un joven asesinado de manera brutal, quema de viviendas, asaltos, crímenes de género, abusos sexuales…
El pueblo reúne desde la crisis de 2001 a esta parte los peores antecedentes en materia de indicadores sociales: desempleo, caída de la producción, planes sociales, pobreza, falta de vivienda, crecimiento de la delincuencia y la corrupción policial.
En ese marco, el incremento de la circulación de estupefacientes en la localidad sorprende a quienes conocen el funcionamiento de lo que se ve y lo que es un poco más invisible.
Entre el incremento de rostros desconocidos hay muchos que apuntan hacia la zona de Rosario y Villa Gobernador Gálvez, cuna de Los Monos y los cárteles del narcotráfico. Llamativamente, dicen, hay demasiados teléfonos celulares con característica 0341. El silencio sobre el tema es producto del temor pero no del desconocimiento de la actividad más rentable y violenta de estos tiempos.