Advierten sobre estafas a jubilados

El Viernes pasado se radicó una denuncia ante la Unidad Fiscal Nº 5 de San Pedro, contra una mujer que según la denunciante “se hacía pasar por abogada”.
Según consta en el expediente judicial, esta persona “ofrecía servicios como abogada a fin de realizar trámites previsionales”.
“Ella desde la primer entrevista se presentó como abogada” dijo Ana María, la denunciante, a “La Opinión”. La “gestora”, exhibía formularios de ANSES y se jactaba de codearse con varios dirigentes políticos de San Pedro.
Por sus “contactos”, decía poder ser capaz de obtener beneficios jubilatorios aunque sus clientes no cumplieran con todos los requisitos.
Ana María, por ejemplo, tiene 56 años y ni un solo aporte jubilatorio. Sin embargo, su “abogada” le prometió jubilarla gracias a “nuevos beneficios”. Le cobró por realizarle el supuesto trámite, la suma de $375. Además, al poco tiempo le sacó $120 más, “para acceder a la tarjeta de cobro en el banco”.
Poco tiempo después, la gestora le cobró $520 adicionales, para conseguir una pensión para la hija de Ana María, que supuestamente se otorgaba para “madres con cinco hijos”.
Finalmente, ya con sobradas sospechas sobre la conducta de esta persona, Ana María concurrió a ANSES para corroborar el estado de su trámite. Allí sus ilusiones se derrumbaron: Se enteró de que no había ningún trámite iniciado y que a su edad, “era imposible que se jubilara”. Había sido engañada.

Más casos
Algunos de los damnificados que hablaron con “La Opinión”, dijeron conocer por lo menos a 11 familias perjudicadas por estas promesas de trámites que nunca se realizaron.
“Mi papá se murió super confiado, de que ella estaba haciendo todos los trámites jubilatorios” dijo una mujer que prefirió mantenerse anónima. “A mis tíos y a las mujeres de mis tíos les sacó plata. A mi mamá le sacó 900 pesos” agregó. Al igual que Ana María, después de algún tiempo de sospechas, la familia decidió consultar en ANSES: “Cuando nosotros empezamos a sospechar, averiguamos si había algún trámite iniciado en ANSES y no figuraba nada hecho”.
“Cuando se lo preguntamos nos dijo que entre abogados y ANSES había una cláusula por la que no se podía dar información sobre trámites iniciados y por eso no figuraba”.
“Además, antes de morirse, a mi papá le sacó un montón de plata por un juicio laboral que no sabemos si lo inició o no” cuenta la víctima. “Estábamos tan engañados y mi papá se murió tan confiado” dice.
Quizás el colmo de toda la situación, fue cuando la “previsionalista” insto a una mujer a realizar 3 pagos en el banco de $300 de una supuesta moratoria, que después se supo eran en realidad 3 cuotas de la Universidad privada en la que la gestora cursa derecho.
Mientras tanto, en el expediente judicial ya constan varios papeles escritos de puño y letra por la supuesta estafadora, en el que apuntó los costos de los trámites. Hasta el momento, en la UFI Nº 5 se aguardaban instrucciones para comenzar con las primeras actuaciones.