A 30 años del segundo Mundial de Básquet que se jugó en Argentina y en el que participó Diego Maggi
El pivote formado en Náutico integró el plantel de la selección nacional que terminó octavo con dos victorias y seis derrotas en el certamen internacional que organó el país entre el 8 y 19 de agosto de 1990. El campeón fue Yugoslavia que derrotó en la final a Unión Soviética mientras que Estados Unidos completó el podio.
A lo largo de la historia Argentina fue sede de dos mundiales de básquet, el primero en 1950 en el que se consagró campeón y el otro en 1990 cuando terminó octavo con Diego Maggi en su plantel, evento del que se cumplen 30 años porque se desarrolló entre el 8 y 19 de agosto.
En el debut frente a Unión Soviética la selección nacional cayó 97 a 77 con un punto del pivote que se formó en Náutico pero un día después se recuperó ante Canadá 96 a 88 en un recordado duelo que revirtió sobre el final y en el que Maggi sumó 13 tantos. Posteriormente, con 12 unidades suyas, el conjunto dirigido por Carlos Boismené se impuso a Egipto 82 a 65 y se metió en los cuartos de final, logro más que importante teniendo en cuenta la actualidad deportiva que lejos estaba de los equipos europeos.
En la primera instancia de eliminación directa, Argentina peleó con Estados Unidos y perdió 104 a 100 en el estadio Luna Park con ocho puntos de Maggi. Posteriormente, en la lucha por el quinto lugar, la Albiceleste fue superada por Puerto Rico 92 a 76 y Australia 95 a 91, cotejos en los que el interno sumó 4 anotaciones en cada uno. Por último, ante Grecia la selección anfitriona fue derrotada 81 a 78 con 12 puntos de Maggi mientras que nuevamente frente a Australia cayó 98 a 84 (el pivote marcó 20, su máxima en el Mundial) y se ubicó octava.
En total, Diego Maggi marcó 74 tantos en ocho cotejos lo que arroja un promedio de 9,25 por cada uno de ellos. También, el jugador que no nació en San Pedro pero hizo las inferiores en el Celeste tuvo la oportunidad de enfrentar a los mejores jugadores de la época que llegaron a Argentina para disputar el Mundial que ganó Yugoslavia con figuras como Drazen Petrovic, Tony Kukoc y Vlade Divac.
De los rivales que enfrentó Argentina, Unión Soviética fue finalista y Estados Unidos, sin jugadores de la NBA, terminó tercero con Alonzo Mourning quien en ese momento estaba en la NCAA al igual que el resto de sus compañeros. Brasil en tanto, contó con Oscar Smith y Puerto Rico con Piculín Ortíz.
Semanas atrás, en una entrevista que brindó a La Opinión desde Mallorca en España donde está afincado, Maggi recordó cómo León Najnudel, el padre de la Liga Nacional, lo reclutó cuando todavía jugaba en Náutico: "Me citaron a una selección de provincia que la manejaba la Asociación de Zárate y la entrenaba Ricardo Acutain. Me citaron a mí e iban un par de chicos de Pergamino, un par de La Plata y no había ninguno de Bahía Blanca, raro. Fue el primer Argentino de Cadetes en 1979 en Catamarca. El entrenador de Capital Federal era León Najnudel".
Y continuó: "No sé qué problema hubo con la Federación de Provincia y no teníamos micro para volvernos. Nos dividimos en los micros de las selecciones de Capital y Santa Fe. Los de Pergamino y Zárate fueron con Santa Fe a Rosario y yo con los de La Plata nos fuimos a Buenos Aires con los de Capital. León me venía hablando en todo el viaje y cuando llegamos a Buenos Aires me llevó a Ferro, me hizo conocer las instalaciones del club a la primera que jugaba Luis González, (Miguel) Cortijo, (Luis) Oroño".
Como todavía restaba el arreglo formal, días después un dirigente del Verdolaga, en verano de 1980, estaba en Mar del Plata y fue hasta Miramar para hablar con los padres de Diego que junto a su familia vacacionaba en esa ciudad. Esa charla fue la que derivó en que Maggi se fuera de Náutico en San Pedro al barrio de Caballito en Capital Federal cuando todavía era un adolescente.