La denuncia por abuso sexual que un joven de 17 años radicó contra un presunto millonario oriundo del conurbano bonaerense, presuntamente ocurrido en el hotel Eser, fue los casos más resonantes del año pasado. La causa está en su etapa final de instrucción y todo indica que tras la feria judicial sería entregada para su elevación a juicio.

El acusado, identificado como Gonzálo Ávila, fue liberado luego de que el juez de Garantías Román Parodi rechazar el pedido de prisión preventiva que interpuso Fiscalía tras el tiempo de ley en el que permaneció detenido en la Comisaría de Rojas.

La fiscala María del Valle Viviani, que instruye la causa, espera que tras la feria judicial estén disponibles los resultados de una pericia psicológica del imputado, de manera tal de reunir todos los elementos probatorios con los que cuenta para pedir al Juzgado que envíe la causa al Tribunal para el juicio.

Aunque Parodi liberó a Ávila al considerar que en ese momento no había elementos suficientes para que “se encuentre justificada la existencia del delito”, Viviani mantendrá la acusación de abuso sexual con acceso carnal.

La fiscala considera que hay prueba suficiente para elevar a juicio el expediente con esa carátula. La investigación comenzó tras la denuncia del joven de 17 años, que aseguró que Ávila lo sometió a prácticas sexuales contra su voluntad en una habitación del hotel Eser durante la madrugada del domingo 24 de julio del año pasado.

Gonzálo Ávila obtuvo la libertad alrededor de un mes después del hecho, con la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de la víctima, sus familiares o testigos de la causa, y con la obligación de constituir un domicilio del que no podía ausentarse por más de 24 horas sin autorización previa.

El acusado tiene domicilio en Monte Grande, partido de Esteban Echeverría, ciudad donde también fue denunciado por “pedófilo y abusador” por parte de la familia de un joven con el que mantuvo una “relación” cuando tenía entre 14 y 15 años, es decir por debajo de la edad de consentimiento, lo que configura un delito.

Gonzalo Ávila decía ser socio de una empresa multinacional petrolera e hijo de un juez y una senadora que tenía jet privado y se jactaba de hablar por teléfono con el expresidente Mauricio Macri, todos datos falsos.

Falso millonario