Vendado y rengo, robó un autoservicio
Una persona que aparentaba estar lesionada asaltó y robo en el autoservicio Peiró. A punta de pistola, se llevó el dinero que había en la caja, se subió a una moto que lo esperaba afuera y huyó con rumbo desconocido. Investigan si se trata de los mismos sujetos que provocaron otros ilícitos similares.
A esta altura de las circunstancias no existe una modalidad standard para perpetrar un hecho delictivo. Hoy en día, todo parece indicar que no hay reparos y que cualquier método sirve para delinquir y aprovecharse de las inocentes víctimas.
El lunes, sobre el cierre del horario comercial, un joven que había ingresado como cliente y que hasta daban ganas de darle una mano por las condiciones en las que se encontraba, terminó engañando a todos. Era el sujeto que minutos después robó la recaudación del día.
Según relataron clientes casuales, el sujeto en cuestión, una persona aparentemente joven, ingresó al autoservicio Peiró, ubicado en Pellegrini al 1200 y nadie sospechó que podría tratarse de un delincuente.
El muchacho de las vendas
El hombre, quien aparentaba estar rengo y presentaba su rostro con varias vendas, como si hubiera tenido un accidente o algo parecido, se mezcló entre las personas y comenzó a caminar entre las góndolas, como habitualmente lo hacen quienes concurren al comercio.
Tomó un paquete de pañales e hizo la cola pacientemente, como cualquier vecino que va a hacer sus compras. Hasta allí nadie podía sospechar de él, pero todo cambió cuando al llegar a la caja extrajo un arma de fuego y obligó a la empleada a entregar el dinero que había disponible.
Al advertir lo que estaba sucediendo, a espaldas del ladrón, quienes alcanzaron a ver el arma comenzaron a correr y escudarse tras las góndolas por temor a algo peor. El sujeto, al conseguir el dinero, se fue rápidamente y huyó en una moto junto a un cómplice que lo aguardaba en la vereda.
El robo tardó los minutos que cualquier otro cliente efectúa cuando compra, el ladrón en ningún momento se mostró nervioso ni nada parecido, por lo que nadie pudo sospechar que había ingresado con fines delictivos.
El hecho, más allá de la angustia e impotencia de las víctimas, sorprendió por su modalidad, además de las dudas que luego generó la apariencia que presentaba.
Investigan a la dupla
Si bien no hay pistas firmes, existen serias sospechas de que los sujetos que robaron en el autoservicio podrían ser los mismos que asaltaron el comercio de Juan Gutiérrez, el presidente del Foro de Seguridad, hace pocas semanas.
La hora, la modalidad, su fisonomía y el tipo de comercio hacen creer que podría tratarse de ellos.
En ambos casos los ladrones se trasladaron en una moto mayor a las 110 cilindradas, llevaban sus rostros cubiertos, portaban arma de fuego y eligieron un comercio del mismo rubro.
En este caso no había cámaras de seguridad como para sumar datos a la causa. Sí existen testimonios, por lo que los investigadores consideran que hay importantes expectativas de hallar a los autores.