A un mes de la presentación de listas, definiciones y dudas en los frentes electorales
El 20 de junio, cada alianza debe presentar sus precandidatos. La Mesa Scioli 2015 dispuso que Pángaro sea su único candidato. Giovanettoni anunciará la suya la semana que viene, tras el plenario de agrupaciones kirchneristas donde Estelrrich y Juancho Correa ratificaron sus intenciones. Barbieri, Monfasani y Salazar, en duda. Ramanzini, caminando. Bennazar, con original campaña. López y Rosa, con proyectos y equipos.
En un mes deben estar presentadas las alianzas y listas que competirán en las Primarias de agosto para que cada frente electoral defina quién será su candidato. A nivel local, la elección está centrada, por supuesto, en la decisión acerca de quiénes irán en octubre a disputar el sillón que ocupa Giovanettoni luego de la renuncia de Guacone.
El fin de semana fue movido al respecto, al menos en lo que al peronismo oficialista respecta. La Mesa Scioli 2015 declinó las precandidaturas del funcionario provincial Damián Mosquera y del presidente del PJ Mariano Veiga para proclamar a Julio Pángaro como único competidor del espacio. Quintana que participó del lanzamiento de la Mesa, no estuvo en Obligado.
Dentro del Frente para la Victoria, los recurrentes plenarios de los sábados bajo la coordinación de Carlos Rotundo y con la participación de las agrupaciones kirchneristas de Unidos y Organizados tuvieron la presencia de Giovanettoni, que todavía no anuncia su candidatura pero, como advirtió La Opinión, hace meses que trabaja para ella.
Allí, Eduardo “Ñato” Estelrrich y Juancho Correa ratificaron lo que le dijeron a este semanario la semana pasada: no apoyarán la candidatura del concejal que tiene a cargo el Ejecutivo y siguen en carrera, “a menos que aparezca un compañero que represente al modelo y a la militancia”.
El precandidato del Movimiento Evita propuso en ese sentido a Carlos Codern, quien no recogió el guante. Ese sábado a la noche le dijo a La Opinión que no está en sus planes ser precandidato y que trabaja “con Giovanettoni”. En el gabinete, claro; aunque también podría ser para su posicionamiento.
En los círculos pejotistas, muy afectos a medir quién la tiene más larga, llamó la atención que Giovanettoni haya ido personalmente a exponerse a que dirigentes con mínimo caudal de voto lo sometan a escarnio (Estelrrich lo comparó con Guacone). De todas maneras, ya se sabe, los votos se cuentan de a uno y hay muchas elecciones perdidas por la presencia de listas paralelas.
El intendente quería una reunión urgente para analizar la situación y resolver los pasos a dar. Todo indica que la semana que viene, probablemente el martes, el traje de precandidato esté listo para usarse. Todavía no definió si competirá con la boleta de Randazzo o la de Scioli. Por lo que se discute a nivel nacional, podría tener suerte: el kirchnerismo planea que los Jefes Comunales, y sólo ellos, puedan jugar pegados a ambas listas.
En el peronismo no oficialista, Monfasani analiza su precandidatura. “Todavía no lo hablé con Sergio”, dijo aunque aseguró que es “probable” que encabece una lista.
De todas maneras, todo está supeditado a lo que suceda en las próximas semanas. El fin de semana estuvo en San Pedro el ahora exmassista Darío Giustozzi, a quien en su regreso al FpV para acompañar a Randazzo le gustaría contar con el diputado sampedrino, cuya fidelidad a Massa no le permitiría un salto de esas características.
El legislador del Frente Renovador tiene una disputa histórica con Pángaro que no oculta y en su agrupación sostienen que “así como Julio trabajó para que Guacone le gane al Turco”, ellos harán lo propio para que el exintendente peronista no regrese al cargo.
En ese sentido podrían enmarcarse las conversaciones que mantienen hombres de Monfasani, Barbieri y Salazar en procura de un acuerdo que los contenga a todos rumbo a las Paso. Si decide presentarse, tendrá una interna con Suárez, apoyado por Rocca, y con Ramanzini, que de la mano de exmilitantes pangaristas recorre barrios para conocer de primera mano las demandas, al tiempo que lanzó una encuesta en Facebook donde solicita a los vecinos que voten cuáles son sus mayores preocupaciones.
Mario Barbieri todavía no definió si será candidato. “Soy un oso que come caramelos, para no citar a Perón” que dijo ser “un león herbívoro” al regresar al país, aseguró el presidente del Concejo Deliberante. Hubo que recordarle que, tras pronunciar esa frase, el histórico líder fue candidato y ganó las elecciones. Todos los barbieristas quieren, pero todavía no está el sí del dirigente más votado de la historia local, que dice que colaborará “desde donde sea necesario” para salir de la crisis.
Cecilio Salazar por su parte analiza la presentación de un hombre propio que impulse su sector, mientras aguarda los pasos de Venegas y su acercamiento al Pro, que en San Pedro tiene a Sergio Rosa como precandidato y al Pato Bennazar como un convidado de piedra que insiste y logra instalarse merced a una original campaña.
Rosa tiene en Sánchez Negrete al articulador de sus equipos de trabajo, con un plan de plataforma que sigue los lineamientos macristas sin descuidar la tarea que ambos desarrollaron desde 2011 hasta ahora en el HCD, “sumando gente con ideas que quiera acompañar”.
Germán López hace lo propio y recurrió para ello a que su mentada experiencia cuente con el apoyo de otros experimentados. El exconcejal Bronce y los exlegisladores Plana y Polimante son parte de su armado. El radical dice que es “orgánico” con la candidatura de Sanz, pero hubiese preferido un alfonsinista, “de Raúl”. Su acuerdo con muchas de las políticas del kirchnerismo lo pone incómodo ante sus correligionarios recostados en la derecha. Lo mismo le sucede a Marcos Arana, que declinó su precandidatura barbierista y tras sumarse al alfonsinismo kirchnerista de Leopoldo Moureau explicitó su respaldo a la precandidatura de Randazzo.