¿Y ahora qué me dice?
La noticia del levantamiento del paro del campo todavía estaba fresca en los diarios del sábado pasado, cuando comenzaron a llegar al puerto local cientos de camiones cargados con los mismos granos por los que se batallaba hasta unas horas antes.
“Les pido a los productores que no se apuren a vender, hasta ver que pasa” decía Alfredo De Angeli frente a las cámaras, casi como si fuera una cadena nacional. Sin embargo, al puerto de San Pedro, ingresaban cataratas de camiones abarrotados de granos.
Solamente el lunes, en Terminal puerto San Pedro desfilaron 700 camiones, con 28.000 kilos aproximados de cereal cada uno. Si tenemos en cuenta que la tonelada de soja vale hoy en día alrededor de $1000 pesos, llegaron casi 20 millones de pesos diarios, desde que se levantó el paro. Desde Terminal Puerto San Pedro, dijeron que podría tratarse de mercadería “guardada” o negocios ya pactados, pero que habrá que esperar para ver si continúa el intenso flujo de camiones.
¿Será que los productores no confían en una salida con el gobierno y aprovechan este “período ventana” para hacer caja? Si no es así, ¿No sería mejor esperar para aguardar por mejores condiciones de comercialización?, ¿O acaso en definitiva vender la soja en estas condiciones si es negocio?, ¿Están verdaderamente convencidos todos los productores? Las preguntas son muchas, pocas las respuestas, pero lo que es claro es que los productores no siguen un hilo conductor e incluso, no todos los que hoy pelean por bajar las retenciones, confían en un final feliz.