“Todavía no pudimos hacer el luto”
La familia de Daniel Pérez, comerciante asesinado el pasado 16 de julio, no encuentra explicaciones para que la Justicia aún no haya atrapado al autor del hecho. A casi tres meses del fatídico episodio, “Camerún” Díaz, el principal sospechoso, no aparece.
Las semanas pasan y la familia de Daniel Pérez no puede creer aún lo que les sucedió aquella noche en el interior de su comercio, cuando un desconocido irrumpió en el lugar, forcejeó con los dueños, sacó un arma y disparó a quemarropa, dando en la cabeza de Daniel, que murió a las pocas horas.
Desde ese día, la Justicia dio vueltas sobre los posibles autores del hecho, mantuvo detenido a un hombre que no tendría relación con el asesinato y hasta dejó pasar las horas sobre algunas pistas que les acercaron sobre el paradero en ese entonces de quien es hoy el principal sospechoso y permanece prófugo: Raúl “Camerún” Díaz.
“No entendemos cómo se ha escapado siempre. Porque tenemos conocimiento que lo tuvieron cercado hace pocas semanas y se les escapó. Como puede ser que hayan pasado casi tres meses y no hayan publicado una foto, ningún dato por si alguien lo ve, porque el tipo puede andar tranquilamente en la calle”, dijo al borde de las lágrimas Ñata, madre de Daniel.
La noche del asesinato Daniel Pérez se encontraba junto a su pareja Cintia y su padre Osvaldo, cuando un hombre alto, morocho, de tez trigueña, pelo corto y vestido con una campera marrón entró al minimercado familiar y se dirigió directamente a la joven. De inmediato, Osvaldo Pérez se interpuso y junto a su hijo forcejearon con el sujeto, que descerrajó dos disparos, uno de los cuales impactó en el parietal izquierdo de Daniel. El asesino se dio a la fuga y Osvaldo Pérez extrajo un arma con la que disparó varios tiros que impactaron en latas y vidrios del local. Daniel Pérez falleció unas horas después en el Hospital local.
“A Cintia jamás la vimos después de ese día”, relató Osvaldo Pérez. “Con el paso del tiempo a uno se le van aclarando algunas cosas. En ningún momento el tipo dijo que era un asalto. Entró corriendo directo a ella y le dijo: ‘Vení pendeja de mierda’. Cuando me vio a mí que venía con el arma en la mano me dijo: ‘No saqués el arma, hijo de p…’.
“No puedo asegurar si el tipo entró con el arma o lo sacó en ese momento. Si una persona entra con fines de robo enseguida nos hubiera pedido la plata, pero a la caja la pasó de largo, fue directo a ella”, contó el compungido padre. “Por más que conmigo no tenía una buena relación, con Osvaldo sí se llevaba bien, y nos resulta curioso que no haya vuelto más”, dijo Ñata.
La familia sufre no sólo por la pérdida del ser querido, sino además porque los tiempos de la Justicia no son los tiempos del dolor. “Creo que quienes investigan saben que hay algo más. Pero quiero que lo agarren pronto, todavía no pudimos hacer el luto por Daniel”, expresó la madre. Su marido, con la mirada fija en algún punto del horizonte consigna: “Sueño con que agarraron a Camerún”.