Terminó el calendario de la Liga Sampedrina: ¿Qué clubes quieren seguir jugando y cuáles no?
Banfield presentó un proyecto para desarrollar en lo que resta del año un certamen por zonas pero no todos los equipos están de acuerdo en competir "por nada" con el riesgo de tener pérdidas económicas. Otros, en tanto, quieren que continúe la actividad porque, de lo contrario, deberán esperar hasta marzo de 2020. En Baradero se diagramó un certamen con los cinco elencos de ese partido más Las Palmeras y ninguno participaría. El certamen debería arrancar en octubre porque todavía resta un desempate y la Promoción.
A diferencia de otros años la temporada 2019 de la Liga Sampedrina (LDS) empezó a mediados de febrero con el Torneo Preparación sólo para primera división y lo organizado quedó corto porque en seis meses, de abril a septiembre, pasaron los emocionantes Apertura y Clausura y, con más de dos por delante para concluir un calendario habitual de competencia local, no hay actividad programada, situación de la que los clubes se alertaron en los últimos días a pesar de que fueron ellos mismos los que optaron el formato en enero.
En ese marco, Banfield presentó el lunes en una reunión ordinaria de delegados en el salón Pedro Barri un proyecto de campeonato por zonas para todas las categorías (de primera a quinta) que se pensó con los 18 equipos y se estipuló dividirlos en cuatro (un grupo con los de Baradero, otro con los de las localidades y Ramallo; y los dos restantes con los de San Pedro). Sin embargo, no todas las entidades están de acuerdo en afrontar otro campeonato y La Opinión consultó a cada una de ellas sobre su postura.
Quiénes sí quieren competir y pujan por ello porque, en su mayoría, consideran descabellado estar hasta marzo de 2020 sin actividad, sobre todo para las inferiores, e, incluso, necesitan generar ingresos para afrontar sus gastos mensuales, son el Taladro, La Esperanza, San Roque, Defensores Unidos, General San Martín, Central Córdoba e Independencia.
En contrapartida, América, Agricultores, Mitre y La Roca no están de acuerdo en un nuevo campeonato y piensan en la próxima temporada. Entre las causas destacan en que no dispondrán recursos económicos para afrontar un certamen en el que no habría en juego nada relevante como un ascenso o clasificación a un torneo regional. A ellos hay que sumarle los clubes de la Liga de Fútbol de Baradero (LFB; Sportivo, Atlético, Fundición, Rivadavia y Portela) que están organizando la copa Ciudad de Baradero en la que también ingresará Las Palmeras por ser el primer campeón de esa asociación.
En el medio y sin una decisión concreta se encuentra Paraná que si bien su objetivo es que haya partidos, en gran medida para que las formativas no tengan tanto descanso, consideran que si no se organiza un campeonato serio hay posibilidades de no afrontarlo.
En ese marco, los delegados de los clubes volverán a reunirse el 23 de septiembre en la LDS para definir si se compite o no con la posibilidad de que surja otro plan como alternativa al de Banfield. Teniendo en cuenta que todavía restan las semifinales y finales de los Clausura para inferiores y el desempate en primera entre Las Palmeras y Portela para conocer quien juega contra Central Córdoba la Promoción una semana después, el campeonato podría arrancar recién el 6 de octubre. Hasta el 22 de diciembre restarían al menos diez fines de semana restando el día de las elecciones general y el de un posible ballotage.
¿Cómo se jugará la copa Ciudad de Baradero?
Participarán los cinco clubes de la LFB (Sportivo, Atlético, Fundición, Rivadavia y Portela) más Las Palmeras por ser el primer campeón de esa asociación cuando todavía existía la Liga Sampedrina (LDS). Los seis equipos se dividirán en dos zonas de tres cada una y se enfrentarán a dos rondas con cruces interzonales en los que se protagonizarán los clásicos. Aunque todavía no se definió, el líder de cada grupo avanzará la final.
El campeonato será para todas las categorías masculinas, incluida la sexta que debe añadirse, y primera femenina. El objetivo es, tal explicó el presidente de la LFB, Jorge González, a La Opinión, "recaudar fondos". "Lo previmos antes para que los clubes no queden tanto tiempo parados. Lo positivo es que los clubes acá no tienen viáticos para viajar a jugar y la gente de Baradero cuando juegan entre ellos siempre responde", agregó la máxima autoridad.
Aunque ante la consulta de este medio González no lo confirmó, la Municipalidad de su ciudad aportaría el dinero para afrontar el costo de los operativos de seguridad lo que significa un ahorro importante para el elenco que es anfitrión.
El desarrollo de la copa Ciudad de Baradero se confirmará en los próximos días porque todavía se aguarda la respuesta de uno de los clubes más importantes de la vecina localidad sobre su participación o no, aunque está todo encaminado para que lo haga a excepción de algún contratiempo inesperado.