"Hacía tres meses que me hice el tatuaje", dijo una de las postulantes a la Policía Local cuando fue consultada por La Opinión. "Decía el nombre de mi hijo", agregó.
En el anhelo de entrar a la Policía Local, la joven mamá tomó la drástica decisión de quitar de su antebrazo las letras grabadas hace poco tiempo. Cabe recordar que el requisito de no poseer "tatuajes en lugares visibles" fue una de las polémicas que desató opiniones encontradas cuano el lunes comenzó el registro de aspirantes en la Dirección de Inspección.
"Vine el lunes, llegué tarde y me quedé sin numero. Volví el martes a las cuatro y media a hacer la cola, me atendieron como las nueve de la mañana; me siento en el escritorio y me dicen 'no, con tatuaje no te podés inscribir', le digo 'pero tengo turno para el miércoles sacármelo'. Me dice 'bueno, volvé el jueves cuando te lo hayas sacado'", relató la postulante a ser parte de la nueva fuerza.
"El jueves vuelvo a las 5 de la mañana, y el chico muy amable me dijo 'volvé cerca del mediodía', y así fue que acá estoy, con mucho dolor porque hacía poquito que me lo había hecho, pero ya está", agregó
"Yo quiero ser policía", reiteró la mujer de 29 años y enfatizó: "Quiero ser policía porque así lo siento". Además contó que está haciendo dieta para bajar de peso y está intentando dejar de fumar. "Yo me saqué el tatuaje y deseo correr todo tipo de riesgo", concluyó.