Por qué no termina el festival de celulares en la Municipalidad
La orden de revisar todos los teléfonos de la flota municipal derivó en hechos insólitos. Desde exfuncionarios que siguen usando los minutos pagos por los sampedrinos a empleados de bajo rango que se fueron haciendo los distraídos. Giovanettoni dio la orden de controlar y recortar pero la tarea ya estaba hecha con antelación, nunca se tomó la decisión política de ejecutarla.
Aunque el informe se guarda bajo siete llaves, la sorpresa de todos los que escucharon que en 2014 se pagó más de medio millón de pesos en concepto de facturas de celular, los datos trascienden la frontera de lo imaginable.
El Intendente interino, Fabio Giovanettoni encomendó la tarea a alguien de su estrecha confianza y así comenzó a poner en marcha la poda de líneas y aparatos que muchos utilizaron a destajo o seguían utilizando pese a no pertenecer ni siquiera a la planta municipal.
Claro que el método que se eligió fue bastante ingenuo: llamar a todos los teléfonos que figuran en la factura para determinar quién los tiene. Claro, Movistar y Nextel son las tres compañías que facturan a la comuna los consumos sin control. Algo que nadie le avisó al Intendente interino es que ese relevamiento ya había sido hecho en varias áreas durante la anunciada “Emergencia Administrativa”. Sólo un área tenía a mano su informe para entregar pero aún así comenzaron de cero. En aquel momento cada sector debía informar sobre los celulares que necesitaba y justificar su uso y, en la medida de lo posible, proponer el modo de restringir los gastos. Las responsables de carteras que hicieron el trabajo entendieron que nada iba a cambiar porque faltó la decisión política. El método que se pretendía utilizar era directamente incautar chips y aparatos para su posterior devolución a las empresas.
Ahora, con la modalidad implementada y en manos de alguien poco experto en estos menesteres los disparates estuvieron a la orden del día: Mientras se chequeaban las líneas, los sms entre quienes sabían que estaban por ser descubiertos se avisaban o despedían según el grado de amistad que los unía. Algunos llegaron a compartir el número desde donde se los llamaba para que los demás no atiendan.
La tarea incluso requirió nuevamente de llamadas de incógnito para saber quién tenía cada número. Así pudieron sorprender a algunos exfuncionarios que no tienen nada que ver con el Municipio y seguían gozando de comunicaciones gratuitas o se quedaron con los aparatos para ser liberados y usarlos con otro chip. Cuando la noticia se hizo pública varios teléfonos móviles se apagaron para siempre ante la sola posibilidad de ser detectados y formar parte de los que “robaron minutos”.
El mecanismo de flotas con clearing que ofrecen las empresas citadas permite no sólo restringir las líneas que únicamente sirven para recibir llamadas sino la asignación de una determinada cantidad de minutos libres. Así, un médico del hospital por ejemplo, puede recibir todas las llamadas necesarias y tener un cupo amplio de minutos, mientras quien por ejemplo, se desempeña en un cargo administrativo solo tener habilitada una línea para recibir puesto que además posee la telefonía fija en su despacho. Es solo sentido común y llamado a la empresa correspondiente para que un ejecutivo de cuentas proceda en base a las directivas que reciba.
También se deduce que las empresas de telefonía tienen buenos planes para ofrecer a clientes de la envergadura del municipio y diferentes rangos de costo para el uso intensivo, amén de la provisión de los aparatos.
Ahora solo resta esperar que le informe se haga público, no por los nombres de quienes utilizaban lo que no les correspondía, sino porque el pueblo tiene derecho a saber cuánto se gasta y cómo se distribuye la posibilidad de sistemas de comunicaciones que cada vez más tienden a utilizar alternativas gratuitas como whatsapp o la mensajería que seguramente cada uno de los lectores de este semanario ya conoce y utiliza aunque el aparato que deba adquirir sea cada vez más sofisticado. Por lo pronto habría orden de cortar al menos 60 líneas para certificar si alguien las reclama y en caso de corresponder le será devuelta.
Bueno… una cuestión: la señal del internet en el Municipio es malísima!
En números “claros”
-Según las fuentes que se consultan las flotas municipales tienen entre 180 y 250 celulares.
-De todos los señalados al menos 80 no contestaron el llamado de los “controladores”.
-Hay una flota especial entre los contabilizados que se compró para instalar los botones antipánico.
-En al menos un caso, respondió la expareja de un exfuncionario.
-La mayor cantidad de aparatos se compró antes de las elecciones de 2011.
-Exdirectores, exsecretarios y “alcahuetes” municipales tenían aún las líneas habilitadas.