El jueves por la tarde personal de la Comisaría local con Juan Catalano a la cabeza procedió a la clausura de un taller de motos ubicado en la intersección de Dávila y Belgrano.
Junto a personal de la Dirección de Automotores constataron que el comercio carecía de habilitación municipal y libros para la actividad. Además secuestraron un rodado marca Yamaha de 250 cc con el número de motor adulterado.