Oficialismo y oposición disputan agenda en el HCD
Cambiemos hace valer la mayoría para aprobar sus proyectos y hasta se dio el gusto de atacar en sesión a Ramanzini, que lidera un bloque aliado. Los ocho opositores tratan de ganar espacio en la agenda tras seis meses silenciosos. El Ejecutivo responde los pedidos de informe y deposita en los concejales del partido Fe la defensa de sus iniciativas. La segunda mitad del año promete ser rica en debates.
La oposición en el Concejo Deliberante se despertó del letargo en el que se vio sumida durante los primeros seis meses del Gobierno de Cecilio Salazar. Lo hizo para poner en debate dos temas a los que llegaron algunas semanas tarde, pero llegaron: la Policía Local y la renuncia/denuncia de Paola Prez. Si bien lograron imponer una agenda, la respuesta del oficialismo fue dura y en sesión, lo que da cuentas de que las fichas se acomodan en el Poder Legislativo local y permite inferir que la segunda mitad del año será, sino más rica en debates, por lo menos más entretenida.
Los ocho concejales opositores firmaron el proyecto de ordenanza para crear un “mecanismo de transparencia” en la selección de los cadetes que forman parte de la instrucción de la Policía Local y que en nueve meses estarán en la calle. El proyecto tenía que pasar a comisión, pero los ediles pidieron abrir el debate y hubo discusión.
Durante más de una hora cruzaron pareceres durante la última sesión, con munición gruesa que dejó en claro que el oficialismo no se va a achicar ante los embates de una oposición a la que el número no le alcanza para imponer ningún proyecto.
El oficialismo reaccionó
El Gobierno quiere que sus concejales sean los que marquen la agenda. Las instrucciones parecen haber sido certeras. Tanto, que la voz cantante durante los debates no la llevó el presidente del bloque Iván Paz, sino Mónica Otero, de mayor experiencia política y de profundo conocimiento del funcionamiento del HCD, a cuyos debates siempre asistió como empleada espectadora y que ahora la tienen en el centro de las polémicas, como protagonista activa.
De todas maneras, a Paz le tocó hacer gala de su apellido y oficiar de componedor. Neyra y Maroli también hablaron, a su turno, con enunciados efusivos. Del lado “Pro”, Pelletier y Rosa tuvieron sus momentos. El barbierismo, de cada vez menor influencia en el bloque, tuvo a Elisa Ferraro navegando en aguas turbulentas y a un presidente del Concejo Deliberante cuya experiencia legislativa en el Congreso de la Nación provocó gestos de sorpresa durante la jornada del jueves, que duró más de cuatro horas.
El debate, poco productivo en relación a los temas que hacen a la vida institucional del Concejo Deliberante y la influencia que tiene en la comunidad, dejó en claro que la oposición decidió salir del silencio autoimpuesto desde hace seis meses.
Los tres ediles del Frente para la Victoria y Quintana, que votaron en contra varias iniciativas del Gobierno, tuvieron encendidos discursos. Incluso fueron los únicos que no acompañaron el Presupuesto, que quedó aprobado la semana pasada.
Ramanzini dejó de lado su acompañamiento casi obsecuente y le costó duras críticas. Sus compañeros de bloque José Luis Tirelli -que regresó tras una extensa licencia- y Patricia Rocca votaron en consecuencia, aunque la exdiputada se abstuvo durante el tratamiento del pedido de informes por los presuntos desvíos de recursos que denunció la exfuncionaria Paola Prez, abstención que respetó a la hora de votar, pero no a la de opinar, ya que tuvo varias intervenciones durante la discusión.
Dalmy Butti no tomó la palabra en los cruces, que incluyeron chicanas varias, pero acompañó los polémicos proyectos de la oposición.
Largo debate en sesión
Cambiemos aprovechó su mayoría para imponer un apartamiento del reglamento e introducir para tratar sobre tablas un proyecto de decreto para que los ocho opositores presenten “toda la documentación/denuncias que hayan recepcionado en torno a irregularidades en el proceso de selección de aspirantes a la Policía Local”.
Ello para evitar el “manto de sospecha” que consideran quedó sobre el tema. Mónica Otero y Ariel Ramanzini protagonizaron el principal cruce. “Usted fue víctima de una denuncia penal de Carrió y dijo que lo difamaron”, señaló Otero en relación a la causa penal que tramita en el Juzgado Federal y en la que la diputada nacional acusó al edil local de ser “testaferro de Sergio Massa” y de “lavar dinero del narcotráfico”.
“Cuando se instala el manto de sospecha es muy difícil revertirlo. Usted hizo una conferencia de prensa y la sospecha sigue instalada”, disparó Otero, que recibió la queda de Ramanzini: “Es un ataque personal horrible, Carrió no acercó ninguna prueba a esa falsa denuncia que hizo”, sostuvo.
“La gente quiere saber si las cosas se hicieron bien. No tienen por qué enojarse. El procedimiento de selección fue horrible. Si están bien hechas las cosas,cuál es el problema, qué se esconde”, dijo el del Frente Renovador sobre la Policía Local.
A la hora de tratar el pedido de informes sobre los recursos que llegaron a la Municipalidad durante el temporal y la modalidad de distribución, el debate altisonante volvió al recinto.
Con los jóvenes de su partido presentes en el Salón Dorado, Otero apuntó a la oposición: “Están poniendo un manto de sospecha sobre Juventud Fe. Mírenlos a los ojos y díganles ladrones, porque eso es lo que sospechan”.
“Dejen que la Justicia actúe. Lo mismo nos dice el Frente para la Victoria cuando se trata de Cristina, de Máximo, de Jaime, de Báez. Dejen que la Justicia actúe”, pidió Otero, quien lanzó sobre la oposición una de las variantes del famoso “teorema” del diputado radical Raúl Baglini: “Cuanto más lejos del poder están, más irresponsables son”.
Desde el FpV, Mosquera hizo “una reivindicación de la militancia, sobre todo de los jóvenes” y lamentó las consideraciones de la concejala de Cambiemos. “De ninguna manera los estamos juzgando, son personas de las que hay que seguir el ejemplo”, sostuvo y y agregó: “El manto de sospecha no lo generamos nosotros. Lo está diciendo una funcionaria del equipo del intendente. Hizo una denuncia en la justicia penal, no podemos hacer oídos sordos”.
“Queremos que haya transparencia y explicaciones, ni más ni menos. Si hicieron las cosas como corresponde y está todo en orden, no tiene nadie por qué enojarse”, repitió Ramanzini.
También hubo cruces cuando trataron el aumento de tarifas del transporte público.
Respuestas del Ejecutivo
El Gobierno elevó respuestas a inquietudes planteadas por el Concejo Deliberante. A un proyecto de resolución que sugirió la creación de un fondo especial de obras y mantenimiento de las cuencas hídricas, la Secretaría de Obras Públicas indicó las gestiones hechas en relación a la problemática, aceptó la sugerencia y recordó que el problema en algunos barrios es por la falta de “una correcta planificación” en su construcción.
También respondieron el pedido de informes relacionado con los carteles de calle Mitre y adyacentes, retirados durante la gestión Giovanettoni para su restauración por parte del contratista Rolando Gilberto Gómez, contratado en julio del año pasado.
De acuerdo al presupuesto, se reemplazarían 160 carteles con un costo de $ 285 cada uno, incluyendo materiales, mano de obra, extracción y colocación. La forma de pago era 50 % al inicio y el resto contra entrega.
En agosto se pagaron 22.800 pesos. El 4 de diciembre se emitió una nueva orden de pago, por $ 45.600 para la restauración de los carteles de calle Pellegrini que la gestión Salazar dejó sin efecto.
“Este Municipio ha requerido al proveedor la colocación de los carteles habiéndose comprometido su colocación para los próximos días”, informó el Ejecutivo.