Nombraron a Alan Ocampo en el cargo del que “bajaron” a Marta Perret
El profesor de matemáticas, que cumplía cargos directivos en la secundaria 8, fue designado coordinador regional de Políticas Socioeducativas pese a que en 2012 había estado involucrado en la falsificación de la firma de una directora de escuela. Se trata de un cargo para el que había sido designada la exsecretaria de Desarrollo Humano de Barbieir, Marta Perret, y del que la "bajaron" a último momento. Durante la campaña 2015, el extitular del Partido Socialista y exesposo de la actual funcionaria Karina Chiarella trabajó activamente para Cambiemos y la candidatura de Cecilio Salazar.
La Dirección General de Cultura y Educación designó al sampedrino Alan Ocampo como coordinador regional de Políticas Socioeducativas, el cargo para el que fue elegida y luego "bajada" Marta Perret, exsecretaria de Desararollo Humano de Barbieri e integrante activa de la UCR que preside Martín Pando.
La designación de Ocampo se supo la semana pasada, cuando el propio profesor de matemáticas y miembro del equipo directivo de la secundaria 8 lo anunció a conocidos suyos. El extitular del Partido Socialista comenzó a despedirse de sus compañeros de trabajo y les contó la novedad.
Esta semana fue confirmado en el cargo, que depende de la Dirección de Políticas Socieducativas del Ministerio de Educación provincial, que conduce Gabriel Sánchez Zinny, y cuya directora es la socióloga de extracción radical Carolina Ruggiero.
Foto: La exfuncionaria barbierista y militante radical Marta Perret.
Si la decisión intempestiva de "bajar" a Marta Perret —ya había tenido entrevistas y hasta habían avisado a referenes educativos de la zona sobre su designación— había caído mal en el radicalismo, el reemplazo por el exreferente socialista que trabajó activamente en la campaña 2015 de Cecilio Salazar sorprendió aún más.
Sobre todo porque la decisión política de "bajar" a Perret y nombrar a Ocampo llegó en medio del análisis de la Rendición de Cuentas del complicado y deficitario ejercicio 2017, cuya defensa en sesión deberá asumir el presidente de la comisión de Presupuesto, Martín Pando, el jueves próximo.
Foto: Ocampo y Salazar, durante la campaña 2015.
La coordinación regional de Políticas Socioeducativas se trata, claramente, de una designación política, aunque hay una serie de requisitos formales para el nombramiento, que implican una trayectoria vinculada a la educación y a las cuestiones relacinadas con el abordaje sociocomunitario de problemáticas educativas.
Ocampo es el exesposo de la actual secretaria de Desarrollo Humano, Karina Chiarella y fue varias veces candidato por el Socialismo. Como docente, ocupó diversos cargos directivos en colegios secundarios de la ciudad, donde se desempeñó como secretario, vicedirector y director, lo que le implicó muchas veces ocuparse de cuestiones relacionadas con problemas sociales del alumnado.
Foto: Chiarella y Ocampo junto a Ricardo Alfonsín, en 2010, durante un acto que encabezó Hermes Binner.
Tras su designación, desde la oposición recordaron que en noviembre de 2012, Alan Ocampo se vio envuelto en una polémica por por haber sido acusado de falsificar la firma de la directora de una escuela de Gobernador Castro para que los alumnos participaran de un torneo de fútbol denominado "Copa Coca-Cola" y organizado por esa marca de bebidas gaseosas.
Aunque el docente siempre sostuvo su inocencia —incluso envió una carta documento a La Opinión cuando se publicó la noticia por considerar malicioso el uso no jurídico de la palabra "sentencia"—, solicitó la suspensión del juicio a prueba (probation) y cumplió con tareas comunitarias que ofreció al Juzgado interviniente para "reparar el daño" y evitar así la continuidad de un proceso penal que podría haberlo llevado a juicio, donde se habría establecido si tenía o no responsabilidades en el caso.
Foto: El equipo de Gobernador Castro de la polémica por la Copa Coca Cola.
La figura de la "probation" se aplica a delitos considerados no graves. Ante la solicitud del encartado, el Juez puede disponer el cumplimiento de una serie de reglas de conducta y de tareas sociales que sean consideradas "reparadoras del daño" objeto del proceso a cambio de dejarlo sin efecto, "sin que ello implique confesión ni reconocimiento de la responsabilidad civil correspondiente", según dice la ley.
Si durante el tiempo de suspensión del proceso el acusado no comete nuevos delitos y cumple con las prerrogativas impuestas, al término del período establecido quedará desvinculado y la situación penal que atravesó no será computada como "antecedente".