Una tranquera en el camino Juan Ismael Giménez repuso el debate sobre la “posesión” de terrenos costeros
Vecinos que suelen hacer salidas de esparcimiento en esa zona fotografiaron una nueva tranquera que marca el "fin del camino" Juan Ismael Giménez a la altura del km 6,5 y a unos 100 metros de donde estaba el antiguo final, históricamente discutido. La oposición elevó un pedido de informes tras recorrer el lugar. Un debate en redes sociales provocó una carta documento del abogado Daniel Spirópulos, que reside barranca arriba, luego de que lo señalaran como uno de los presuntos responsables. La presencia de alambrados y portones que cierran el paso hacia la costa había sido advertida por La Opinión hace casi tres años.
Una serie de publicaciones en Facebook, impulsadas por personas que salían a hacer "esparcimiento" por la zona de Juan Ismael Giménez más allá de Cantando en el Río, revelaron que, una vez más, apareció una tranquera que cierra el camino de la costa al paso vehícular, con un cartel que advierte que no hay salida.
El tema derivó en un pedido de informes en el Concejo Deliberante, presentado por la oposición, y en un debate en redes sociales que incluyó hasta cartas documento entre personas que residen en la zona y un familiar que expuso acusaciones por el mismo medio.
No es la primera vez que el tema, históricamente discutido, vuelve a debatirse públicamente en los últimos años: ya lo había advertido La Opinión en 2016, cuando aparecieron hasta máquinas similares a las viales de la Municipalidad que trabajaban en el mejoramiento de un camino que, desde una propiedad privada, iba hacia el río.
En una recorrida que este medio hizo en enero de 2017 en la zona que se conoce como "paraje Laguna Célis" pudo registrar la presencia de portones y alambrados en dirección a la costa, es decir con toma de posesión sobre territorios que se suponen públicos.
Esa situación es similar a la del emprendimiento inmobiliario conocido como Apart Club San Pedro, ubicado aproximadamente un kilómetro hacia el noroeste, que también tiene "acceso exclusivo al río", a pesar de las restricciones impuestas por la legislación vigente.
La semana pasada, quienes circularon por la zona se encontraron con otra tranquera ya no sólo en dirección al río sino una que marca el "fin del camino" costero a aproximadamente 100 metros de donde terminaba antes.
Hasta no hace mucho un cartel hecho a mano y de trazo irregular decía "fin del camino. El rancho de Carlito (SIC), donde el diablo perdió el poncho. Paraje Laguna Celi (SIC)".
El antiguo "fin del camino" y el cartel de "Carlito".
Sorprendidos por la aparición de la tranquera antes de ese antiguo "fin del camino", quienes pasaron por la zona fotografiaron e hicieron públicas las imágenes.
Se preguntaron por qué un camino público ubicado a la vera del riacho podría estar cerrado como si fuera parte de una propiedad privada y si alguien podría tomar cartas en el asunto.
La primera publicación de las últimas semanas sobre la nueva tranquera.
Ahora la situación llegó al Concejo Deliberante luego de que los ediles del Frente de Todos se hicieran eco de las publicaciones. La concejala Florencia Sánchez estuvo en la zona para verificar lo que los vecinos planteaban y el bloque elevó un pedido de informes.
"Es insostenible que un particular pretenda cercenar el paso de cirulación de un camino de ribera al río y que además instalen cartelería señalando la propiedad privada", dice el proyecto, que le recuerda al intendente que en su primer mensaje anual dijo que iba a trabajar para "recuperar la posesión plena de aquellos inmuebles ubicados a la vera del riacho San Pedro, desde la Bajada de Chaves hasta Vuelta de Obligado".
La foto de la tranquera que difundieron los concejales del Frente de Todos.
El comerciante Hugo Ferro se refirió al tema en redes sociales, apuntó al abogado Daniel Spirópulos y eso le valió la recepción de una carta documento.
"Mientras nos tienen entretenidos con la cuarentena, hay gente que compra calles", publicó Ferro en redes sociales, compartiendo una foto de la tranquera que cierra el camino Juan Ismael Giménez. En medio del intercambio de comentarios dijo que "el doctor Spirópulos es el dueño del terreno que está arriba" y agregó: "Es mi cuñado este señor, pero los familiares no se eligen y a San Pedro lo quiero más que a él".
Según expuso el propio Ferro, conocido comerciante del rubro pastas frescas y miembro de la organización solidaria Huellas, Spirópulos le envió una carta documento para que "se abstenga de continuar" con lo que denomina una "conducta ilícita reflejada en reiteradas amenazas de daños a la propiedad privada, sumada a intentos de usurpación, en conjunto con personas convocadas por usted mediante la red social Facebook".
La carta documento está firmada por el abogado Daniel Spirópulos en su carácter de "titular de los inmuebles identificados" con la correspondiente nomenclatura catastral que obtuvo, según expone allí, "conforme sentencias dictadas en los procesos judiciales" iniciados uno por el propio Spirópulos para hacer valer una posesión veinteañal y otro por Jorge Daniel Font a través del instituto de la usucapión.
La carta documento que recibió Hugo Ferro y expuso en redes sociales.
Más allá del debate "familiar" entre Spirópulos y Ferro, la tranquera existe y cierra el paso como si por sobre el límite que establece se tratara de una propiedad privada, cuando todo indica que se trata de la continuidad del camino Juan Ismael Giménez y debería ser público.
En el pedido de informes, la oposición solicita saber qué medidas adoptó el Gobierno respecto de la restricción de circulación. Desde el bloque de concejales del Frente de Todos informaron además que solicitarán la posibilidad de acceder a los planos catastrales para verificar la situación.
“Les anuncio, hoy, que me voy a poner al frente del recupero efectivo de los terrenos de jurisdicción provincial o municipal que se encuentran en la zona norte de nuestra costa, pero en posesión de terceros que no son los dueños”, expuso el intendente Salazar en su mensaje anual en abril de 2016, el primero desde que asumió.
Ese día dijo que iba a pedirle a quienes ocupan espacios que no les corresponden que retiren los alambrados, animales y bienes que estén dispuestos en los terrenos que son del Estado, al punto de asegurar que lo haría personalmente.
“Yo mismo, en caso de que no lo hagan, cortaré los alambrados y mandaré las topadoras, porque queremos que la costa de los sampedrinos la puedan disfrutar los sampedrinos y es este equipo de gobierno el que va a cuidar y custodiar especialmente que eso ocurra”, había advertido.