Los trabajos para disminuir la contaminación llevarán dos meses
Lo confirmaron a La Opinión trabajadores de las empresas que prestan servicio desde el día en el que los buques de Hong Kong e Italia colisionaron a la altura del kilómetro 285. Preocupación de isleros y pescadores por el derrame de combustible.
Las firmas Clean Sean y Cintra S. A. trabajan desde el 13 de diciembre sobre el río Paraná entre el kilómetro 260 y el 290, zona en la que producto de los fuertes vientos colisionaron los barcos Octbreezee Island de bandera de Hong Kong y Ghetty Bottigliery de Italia, provocando un importante derrame en el curso fluvial el 14 de diciembre.
Hay gran hermetismo en torno a las tareas que se desarrollan en el lugar. Desde la empresa Cintra S. A. indicaron que no están en condiciones de brindar declaraciones y la misma respuesta dieron desde prefectura local aunque a nivel nacional emiten boletines con escueta información.
De todos modos La Opinión pudo dialogar con trabajadores de la empresa Clan Sea que llevan adelante las tareas sobre el margen izquierdo de la costa entre el kilómetro 261 y 271.
Según relataron los operarios están “limpiando” la costa. “Estamos con barreras para contener el derrame, barriendo el combustible del continente. Lo que está pegado lo retiramos con agua a baja presión, luego recogemos todo con absorbente”, detallaron.
Consultados sobre cuál es la magnitud de la contaminación aseguraron que es imposible precisarlo porque son varias las cuadrillas que están trabajando divididas en diferentes sectores. De todos modos indicaron que no han encontrado animales muertos y que todo lo que está manchado con combustible es vegetación.
“Por estos días estamos en una etapa de sacar la mayor contaminación, después tenemos que limpiar árboles y plantas”, indicaron y estimaron que los trabajos se prolongarán durante 50 días como mínimo.
Sobre el barco de Hong Kong
Los mayores daños los sufrió el buque Octbreezee que muestra una avería de aproximadamente seis metros liberando el fuel oil, un derivado del petróleo que ocasiona severos daños a la fauna ictícola y a la flora de las costas afectadas.
Desde el día del accidente el barco se encuentra “escorado a estribor con barreras de contención de derrames, ubicadas en popa”, mientras lo reparan. Desde prefectura estiman que serán por los menos 10 los días que la embarcación permanecerá hasta que recupere su posibilidad de navegar.
El día del accidente prefectura emitió un alerta que prohibía la circulación por aguas aledañas al derrame, ahora solicitan que lo hagan con precaución ya que hay muchas embarcaciones pequeñas, incluso buzos, trabajando en el lugar para contener el combustible derramado.
PESCADORES E ISLEROS EN ALERTA
Del mismo modo que impactaron las imágenes de los barcos siniestrados, las fotografías de las vacas manchadas con combustible hasta la mitad del lomo generaron malestar en los ambientalistas que aseguran que el escape de fuel oil no ha sido controlada de la mejor manera.
“Lo que cae a la profundidad lo absorben los peces y lo que queda arriba las plantas de la costa”, informó a este semanario el especialista Enrique Sierra y completó: “Todo está en riesgo, desde plantas hasta pescados”.
En los últimos días fueron muchas las personas que aseguraron querer comer lo que pescaron en las costas de San Pedro y no pudieron hacerlo por “la baranda” que tenían, en obvia referencia al aroma y sabor. “Era una mezcla de olor a podrido y combustible”, describieron.
En ese sentido Sierra informó que lo derramado se “acumula con mayor facilidad en el sábalo y la boga que tienen mucha más grasa”, luego recomendó no ingerirlos aunque desde Prefectura y el Ministerio de Seguridad de la Nación aún no emitieron ningún comunicado al respecto.