Los jóvenes instruyen a los Concejales contra la discriminación
Dentro de la materia Construcción de la Ciudadanía, alumnos de la Escuela 7 presentaron una idea al HCD: la adhesión a la Ley antidiscriminación, que hizo pensar al cuerpo y hará reflexionar a la sociedad. Los boliches se verán directamente afectados en un tema que los incluye.
Las situaciones de discriminación fueron materia de debate en la comunidad en muchas oportunidades. Los locales de diversión nocturna se han mantenido en el ojo de la tormenta por estas situaciones. Sin embargo, no se había hecho hasta el momento mucho más que darlas a conocer públicamente.
Alumnos del 8º año, división “B”, de la ESB que funciona en la Escuela N° 7, presentaron en la Municipalidad un proyecto para que San Pedro adhiera a la Ley Nacional Nº 23.952, conocida popularmente como “Ley Antidiscriminación”. Este proyecto nació, como otros tantos reconocidos públicamente, desde la materia “Construcción de la Ciudadanía”. Los alumnos idearon el proyecto con el primer objetivo de reflexionar sobre una problemática actual, invisible y que daña de manera importante a quienes la padecen.
Situación común
Sólo con revisar los archivos de La Opinión, las quejas y denuncias públicas por discriminación abundan y en su mayoría tienen como protagonistas a jóvenes.
Si bien en el Concejo Deliberante la diversión nocturna fue motivo de debate en el ámbito fundamental para esta práctica, era importante reflexionar sobre temas puntuales que pudieran surgir como consecuencia de la nocturnidad. Además del horario y la discriminación, a la noche se le deben cuestionar temas tales como la presencia de menores y la gran cantidad de alcoholizados que llegan a la guardia del Hospital todos los fines de semana; la violencia; la responsabilidad social y empresaria; la seguridad interna y externa; la falta de presencia familiar; entre otros temas.
La noche está ligada a la discriminación y la mayor cantidad de denuncias son recibidas por los medios de comunicación –ante la falta de un espacio específico para denunciar estas acciones–, como consecuencia de arbitrariedades en las puertas de los boliches y la “dedocracia”. Son los miembros del personal de seguridad los que imponen las reglas y quienes a su gusto o acatando órdendes “eligen” quiénes pueden divertirse y quiénes no. En muchos casos, los jóvenes son “rebotados” sin chances siquiera de mostrar un DNI que acredite la edad y simplemente por su forma de vestir, apariencia o condición económica, y bajo la frase “acá decido yo y vos no entrás”.
La discusión en el recinto
El proyecto ingresado por los alumnos llegó rápidamente al Concejo Deliberante en forma de Proyecto de Ordenanza y fue enviado a la Comisión de Desarrollo Humano, que preside la Concejal Sandra Mari. “Es muy bueno. Me gustaría charlar un poquito con los chicos para darles participación, porque tuvieron la iniciativa. Hay que escucharlos y ver qué opinan sobre el tema; qué los llevó a realizar el proyecto”, comentó la edil. En tanto, la iniciativa comenzó a ser analizada en una reunión conjunta de las Comisiones de Presupuesto y Desarrollo Humano en la que evaluaron qué hacer con una iniciativa anterior, presentada en 2006 por el radicalismo que pena las prácticas discriminatorias con multas.
El Municipio, por su parte, dejó en claro su pensamiento: “Es propósito del Municipio de San Pedro dejar claramente fijado que rechaza toda forma de conducta humana que implique directa o indirectamente discriminar a un semejante, sea cual fuere el motivo que la causara, por razones de sexo, raza, religión, políticas, económicas, sociales o culturales”, según el texto del proyecto de Ordenanza.
Detalles a implementar
Tal vez la falta de memoria les juegue a muchos una mala pasada. Hace algunos años un grupo de chicos con capacidades diferentes intentó ingresar a un local de diversión nocturna como parte de sus prácticas de inserción. A consecuencia de aquel episodio, se estableció la obligatoriedad de colocar carteles de alerta que promuevan las denuncias.
Ahora, en caso de que se apruebe la iniciativa, se deberían colocar en el ingreso de diferentes locales de acceso público, el texto del Art. 16 de la Constitución Nacional junto con el Art. 4º de la Ley a la que la Municipalidad adhiere.
El cartel deberá tener un tamaño mínimo de treinta centímetros de ancho por cuarenta de alto, estar colocado verticalmente y decir: “Frente a cualquier acto discriminatorio, usted puede recurrir a la autoridad policial y/o juzgado civil de turno, quienes tienen la obligación de tomar su denuncia”.
La Ley
La Ley 23.952 y los agregados de la 24.782, dicen: “1. Quien arbitrariamente impida, obstruya, restrinja o de algún modo menoscabe el pleno ejercicio sobre bases igualitarias de los derechos y garantías fundamentales reconocidos en la Constitución Nacional, será obligado, a pedido del damnificado, a dejar sin efecto el acto discriminatorio o cesar en su realización y a reparar el daño moral y material ocasionados. A los efectos del presente artículo se considerarán particularmente los actos u omisiones discriminatorios determinados por motivos tales como raza, religión, nacionalidad, ideología, opinión política o gremial, sexo, posición económica, condición social o caracteres físicos. Se declara la obligatoriedad de exhibir en el ingreso a los locales bailables, de recreación, salas de espectáculos, bares, restaurantes u otros de acceso público, en forma clara y visible el texto del artículo 16 de la Constitución Nacional, junto con el de la ley”.