La polémica por la tasa para camiones pone en jaque a Guacone
Luego de que el Concejo Deliberante aprobara por unanimidad la creación de una nueva tasa que cobrará derecho de estacionamiento a los camiones que provengan de otras ciudades y el Presidente del cuerpo se opuso enérgicamente, la ordenanza espera ser convalidada por los Mayores Contribuyentes. La convocatoria fue considerada escasa ya que no tuvo eco y generó un reclamo por parte de los concejales, que remitieron una carta a Guacone para “darle letra” y que respete la Ley Orgánica.
El Presidente del Concejo Deliberante Sergio Rosa alzó en solitario su voz contra una ordenanza aprobada por unanimidad mientras estuvo de licencia. Se trata de la creación de una tasa que establece el pago de un derecho de estacionamiento presentada por el Partido Justicialista que pasó por las comisiones correspondientes, tuvo su visto bueno en el HCD y ahora espera el tratamiento por parte de la Asamblea de Mayores Contribuyentes, lo que también generó polémica.
La ordenanza impone un gravamen de 15 pesos para todo transporte automotor que ingrese a la ciudad para carga y descarga, en una ciudad cuyo movimiento en ese sentido es importante teniendo en cuenta la presencia del puerto y la importante operatoria que allí tiene lugar a diario.
Si bien el texto de la ordenanza no establece un cálculo aproximado de la operatoria, y señala que existe un “gran movimiento de camiones en la zona portuaria, sus adyacencias y los camiones de transporte en general que ingresan y egresan a San Pedro”, las estadísticas del Consorcio de Gestión del puerto local permiten analizar la implicancia que tendría esta tasa no sólo en términos de la capacidad recaudatoria sino también sobre las posibilidades reales de que su aplicación sea posible sin generar grandes problemas.
El último relevamiento sistematizado por el Consorcio corresponde al año 2008. Allí dan cuenta de un movimiento portuario de 442.639 toneladas de cereal, 186.862 de fruta y 575.675 de arena. Ello significa un total de 1.205.176 toneladas en el año.
Si se tiene en cuenta que todo eso es transportado por camiones que toleran como máximo 30.000 toneladas cada uno, estamos hablando de unos 40.172 camiones que han ingresado o egresado del puerto local. En su mayoría, corresponden a empresas que no tienen domicilio legal o real en la ciudad, por lo que pueden encuadrarse dentro de los que están sujetos al gravamen aprobado en el Concejo Deliberante por derecho de estacionamiento.
En términos recaudatorios, ello significa 602.580 pesos anuales, un número importante para un Municipio cuyo Secretario de Hacienda supo advertir al Intendente que está “contando monedas” y donde la balanza entre ingresos y egresos tambalea a diario, con los riesgos que implica para el saldo de las cuentas públicas contando incluso algunos puntos extra de coparticipación.
Ahora bien, una de las críticas fundamentales que estableció en soledad el Presidente del Concejo Sergio Rosa es que la operatoria será muy complicada, teniendo en cuenta que “los camiones y los vehículos de características similares que ingresen por los accesos principales de la ciudad transportando cargas, deberán concurrir con carácter previo a realizar la descarga de mercaderías o bienes, a las playas y/o lugares de control municipal habilitados al efecto. El mismo procedimiento deberán seguir los camiones y los vehículos de características similares cuando efectuada la carga de mercaderías o bienes egresen de la ciudad”.
Eso significa ni más ni menos que los camiones deberán ir hacia un lugar que no está especificado aún y que, según señaló Daniel Monfasani, será dispuesto una vez que avance la reglamentación, que estará a cargo del Ejecutivo, tal como lo indica el texto del dictamen de comisión que aprobó el Concejo.
En promedio, los 40.172 camiones da, sin contar sábados y domingos, 153 camiones diarios, aunque está claro que hay épocas del año en que el ingreso es mucho mayor que en otras. Hay unos cuatro meses que concentran unos 30.000 camiones, lo que significa un promedio de 3.750 camiones diarios de lunes a viernes.
Sergio Rosa calificó esa operatoria como un “trastorno urbano” porque” van con un destino determinado” y “no hay lugares lógicos” para albergar esa cantidad de vehículos y puso en duda la contraprestación: “Es bastante opinable cómo se legitima el cobro, porque las contraprestaciones detalladas son casi un derecho de ejercer el poder de policía, van a cobrar por eso. Es inviable, es imposible de instrumnentar y va a tener planteos judiciales, es un tributo que puede generar medidas judiciales cuyo costo sean mayor que lo recaudado”.
Por su parte, Monfasani defendió el proyecto señalando que la idea es “Sacar los camiones del egido urbano, mejorar el tránsito, devolverle al pueblo lo que cada contribuyente aporta a la ciudad, porque lo que le queda a la comuna son las calles destrozadas” y recordó que el Secretario de Hacienda de la Municipalidad Jorge Génova participó del debate sobre la ordenanza y que fue votada por unanimidad en el recinto e insistió: “Esta ordenanza es revolucionaria”.
El Concejo
aconseja
a Guacone
Para que la ordenanza entre en vigencia tiene que ser convalidada por la Asamblea de Mayores Contribuyentes, cuya fecha había sido citada para el jueves de la semana pasada por la Presidenta interina del cuerpo Noemí Bordoy.
Sin embargo, la Concejal Mari primero y el resto de los bloques después cuestionaron la convocatoria y Rosa, de regreso en su cargo, dio marcha atrás porque consideró que ante las dudas planteadas era necesario rever la situación.
El fantasma del Tribunal de Cuentas daba vueltas en el tema, porque el listado de Mayores Contribuyentes que se iba a utilizar era del año pasado, ya que no se conformó el nuevo, y no había llegado por escrito la duda planteada.
Ayer ingresó por mesa de entrada un texto firmado por los presidentes de los bloques Unión Peronista (Carlos Casini), Acuerdo Cívico y Social (Martín Pando) y Matías Velo (Coalición Cívica), donde señalan que “el no cumplimiento del plazo previsto en la Ley Orgánica de las Municipalidades para el envío del listado de Mayores Contribuyentes por parte del Departamento Ejecutivo ha perjudicado el normal funcionamiento del Concejo Deliberante”.
Lo mismo señaló Monfasani en su conferencia de prensa convocada el sábado para defender la ordenanza sancionada: “La Presidenta del Concejo convocó a la asamblea de Mayores Contribuyentes sin saber que el listado no estaba. El HCD viene funcionando mal, se viene manejando mal”.
Guacone se enfrenta así a la primera presión fuerte por parte del Concejo, desde donde le señalan directamente su responsabilidad. Los ediles que firman el texto presentado indicaron que la convocatoria que se realizó “desde el 1° hasta el 15 de mayo para integrar el listado de Mayores Contribuyentes” fue “atípicamente escasa” y le reclaman que “respete el espíritu” de la Ley orgánica para “garantizar una participación amplia, plural y democrática”.
Así, como maestra que deja deberes para la casa, los ediles le piden a Guacone que realice “de manera excepcional, extraordinaria y por única vez, una reapertura del listado de Mayores Contribuyentes por un período no menor a cinco días” y “proceder inmediatamente después, de acuerdo a los plazos y términos que indica el artículo 94º de la Ley Orgánica de las Municipalidades”.