Juicios y prejuicios
Todas las personas cometemos errores en la vida, nadie tiene el calificativo de PERFECTO. Sin embargo a la hora de juzgar al otro de todo consideramos tener el derecho de poder señalar con el dedo acusador, y es aquí donde cometemos un grave error porque hay muchas cosas en las que no solo juzgamos sino que también prejuzgamos, que es un tanto peor... ¿Inventar algo de alguien que no conozco plenamente o simplemente repetir lo que escuche por ahí me hace mejor persona? ¿Cambia en algo mi vida? Yo creo que no, ni siquiera si lo que se dice es verdad, pero aun así hablamos, y lo que en algunos es poco frecuente para otros hablar mal hoy en día se ha convertido en un pasatiempo que en el corto o largo plazo trae sus consecuencias. Porque siempre por lo menos una persona resulta lastimada. Analizamos el concepto de JUZGAR: «él hizo esto, así, es culpable», ¿pero quién me concede a mí el derecho de decirlo? ¿Acaso yo jamás me equivoqué? Si tenemos en cuenta la famosa frase: «El que esté libre de pecado que arroje la primera piedra», nos daríamos cuenta que no podemos juzgar a nadie, porque un error por pequeño que sea no deja de ser un error. Ahora analicemos el concepto de PREJUZGAR: «su apariencia indica ser eso», la pregunta es ¿realmente lo es? ¿Sólo por que una mujer se muestre simpática con un hombre o se vista de una manera sensual quiere decir que es una prostituta? ¿O porque a un hombre jamás se le conoció la novia es un gay? Obviamente NO. Entonces no digamos algo de lo que no estamos seguros. Si tal vez todas las personas comenzáramos a tener en cuenta estos dos conceptos antes de hablar, quizás la sociedad sería diferente. La vida de uno mismo sería diferente, por eso mismo a todo a aquel que lea estas palabras lo invito a reflexionar para que cada vez que abra la boca piense bien lo que va a decir, porque como dije antes aunque yo critique los errores del otro no se borran los míos.... L.S.G.