Evitaron el robo a la sede de la UATRE de Gobernador Castro
El delegado Orlando Mendoza se enfrentó a los ladrones y evitó el robo de la importante cifra que había para pagarle a los trabajadores. Los ladrones llegaron en moto y se encontraban armados.
Gobernador Castro no escapa a la inseguridad que predomina en distintos puntos del partido por estas semanas. Ahora fue el turno de la seccional 1110 que la UATRE tiene en esa localidad aunque el final de este episodio fue diferente a los últimos delitos registrados ya que pudo ser evitado y lograr que los delincuentes depusieran su actitud.
El incidente se originó alrededor de las 14 horas cuando dos malvivientes en moto arribaron a la sede de la calle San Juan y Belgrano. Allí se encontraron con el delegado seccional Orlando Mendoza quien reaccionó e impidió que se llevaran el dinero que había disponible.
Los asaltantes llegaron en dos motos, actuaron con el rostro descubierto y portaban armas de fuego de grueso calibre. Al tomar por sorpresa a Mendoza y otra persona que se encontraba en el lugar, el delegado, reaccionó y sin mediar palabra reaccionó ante la presencia de los sujetos y se trenzó en lucha con uno de ellos. Pese a recibir dos culatazos en la cabeza Mendoza resistió y logró introducirse en la oficina sin que los delincuentes pudieran concretar el hecho ya que no lograron acceder a esa dependencia.
De inmediato los asaltantes se subieron a las motos y huyeron del lugar con las manos vacías. Algunos testigos pudieron advertir la presencia de los sujetos quienes salieron en dirección a nuestra ciudad por el camino real.
Quedó en claro que los delincuentes contaban con información exacta sobre los movimientos administrativos de las seccional ya que durante esa tarde se le iba abonar el jornal de toda la semana a unos 300 trabajadores y la cifra disponible era cercana a los 3 millones de pesos.
“La verdad que no tomé conciencia de las consecuencias que esto podía tener”, dijo Mendoza a La Opinión.
“Una vez que pasó todo me dí cuenta que los delincuentes andaban armados y me podrían haber pegado un tiro”.
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