Estudian la viabilidad de la iniciativa de Rentas
Varios concejales se interesaron en el proyecto elaborado por la Dirección de Rentas para incluir en el sistema tributario local a aquellos que no pueden pagar, y están accediendo a los mismos servicios que quienes lo hacen. Por ahora no recoge mayores adhesiones porque la simpatía política no se lleva bien con el espíritu recaudador.
“Es un proyecto piantavotos, no creo que avance”. Así lo definen desde afuera quienes coinciden en el diagnóstico pero no le tienen mucha confianza al remedio.
La iniciativa que después de un largo trabajo de revisión elaborado desde la Dirección de Rentas se instaló públicamente a partir de una nota de La Opinión, ya tiene forma y está volcada en un puñado de hojas que han sido fotocopiadas para todos aquellos que tienen en sus manos la posibilidad de ejecutarla.
En pocas palabras, la Dirección de Rentas de la Municipalidad plantea que se debe tomar una determinación con todos aquellos sectores de la ciudad y las localidades que tienen una gran tasa de morosidad o incobrabilidad de tasas y que reciben los mismos servicios que reciben todos.
El Secretario de Hacienda Hugo Salviolo, el Contador Edgardo Delbene y el Dr. Facundo Vellón están detrás de esta iniciativa. El primero, como el respaldo principal del área económica y luego de observar que los números y los gráficos son indiscutibles. Los restantes, como convivientes de una realidad que todos los días se apoya en los mostradores y con la necesidad de al menos comenzar a discutir.
Salvo algunos concejales que han pedido copias, pocos se han interesado en indagar en el “cómo” se haría. Es delicado. Hay que poner a trabajar mucha gente: asistentes sociales para identificar a los que tienen una situación irregular y evaluar si pueden brindar alguna prestación, en primera línea.
Después a las comisiones de fomento que en algunos casos deben recrearse y hasta la Secretaría de Obras Públicas para encaminar iniciativas que les den oportunidad de hacer aportes a los que paguen con trabajo.
Escépticos y con una larga lista de iniciativas de buena voluntad que no llegaron nunca a nada podría decirse que con esto no va a pasar nada. Como tampoco ocurrió nada con aquel floreado proyecto de redistribuir en proyectos vecinales lo recaudado por las tasas de las localidades y hasta la cobranza de deudas acumuladas.
Hasta que no se generen gatillos sobre los cuáles nadie tenga culpas, la cobrabilidad de las tasas por servicios seguirá dependiendo de la buena voluntad o la necesidad de vender algún inmueble.
¿Servicios diferenciados?
Como tantos otros temas que invitan a la respuesta demagógica en forma espontánea, éste podría generar una gran polémica. Preguntas:
l ¿Hasta cuándo se van a seguir llevando servicios a barrios que no los van a pagar?
l ¿Hasta cuándo va a soportar el vecino que paga, que otro especule con hacerlo y le recojan la basura tres veces por semana?
l ¿Hasta cuándo la Municipalidad podrá seguir pagando un 10% de su presupuesto a Ashira contando sólo con un 45% de recupero?
Si, tal como anticipó La Opinión, se trasladan a una demanda formal hacia el Ejecutivo los números que el Sindicato de Choferes le tirará arriba de la mesa a las empresas que toman su personal, Ashira podría costarle 200 mil pesos por mes a la Municipalidad y algunos ya sugieren que será el momento de pensar en otras alternativas. La misma empresa con un servicio acotado y más barato, otra empresa y la Coopser o en el peor de los casos la municipalización del servicio.