Disparos y milagro en la Ruta 9
Una familia sampedrina quedó en medio de un tiroteo a la altura de Gobernador Castro. Viajaban en auto en dirección a Ramallo cuando aparecieron otros dos vehículos a alta velocidad en clara persecución. Dos disparos destrozaron la luneta y la mujer que ocupaba el asiento trasero recibió una perdigonada en el cuero cabelludo.
Lo que era una apacible tarde de domingo para la familia de la abogada Marcela Cipolleone terminó en una crítica situación que por milagro no se convirtió en una tragedia cuando se vieron envueltos en medio de un tiroteo en plena Ruta 9.
Junto a su madre y su esposo, habían salido de San Pedro en su automóvil Toyota Corolla a tomar mates. Ante el día nublado, decidieron tomar la autopista con la intención de llegar a Ramallo y allí pegar la vuelta.
A las 18.45, aproximadamente, sufrieron una situación impensada: al intentar pasar una fila de camiones, un Renault Megane que venía detrás a toda velocidad comenzó a pedirles paso, algo que no podían hacer ya que a la derecha tenían a los camiones y a la izquierda la banquina.
Inmediatamente observaron que un Volkswagen Gol llegaba en clara persecución, lo que provocó incertidumbre en el esposo de Cipolleone, que conducía el Toyota. Su madre iba en el asiento del acompañante y ella en el trasero.
“Cuando miré para atrás escuché los bocinazos y el estampido” de los disparos “cuando dieron en la luneta”, relató la abogada y señaló: “Para mí se estaban tiroteando entre ellos, por eso la desesperación del Megane para pasar”.
Les pedían paso y al notar que no había forma de que lo hicieran, comenzaron a disparar sin medir las consecuencias, que podrían haber sido fatales. “Fueron dos disparos a la altura de la cabeza”, dijo Marcela Cipolleone.
Los autos siguieron por la autopista en dirección a Rosario y el esposo de la abogada retomó hacia San Pedro para llevar a la mujer al Hospital, donde fue asistida. Una perdigonada dio en su cabeza y parte del plomo de las balas se alojó en su cuero cabelludo, aunque sin riesgo alguno.
“Pensé lo peor”, dijo la herida el lunes por la mañana, aún shockeada. En el Hospital le sacaron el plomo, le aplicaron una serie de puntos y le dieron el alta.
La policía dio aviso a las Jefaturas de San Nicolás y Rosario. “Todavía no tenemos novedad pero estamos investigando”, informó el Comisario José Luis Salas.