Día del Síndrome de Down
A punto de cumplir un año, el niño sampedrino es el protagonista de una campaña publicitaria de la reconocida marca de ropa infantil G de B, que apunta a la inclusión de las personas con síndrome de down. “Diferentes somos todos y ‘especiales’ son las pizzas”, dijo su madre.
Una publicación en Facebook de Sin Galera provocó una catarata de Me Gusta, compartidos y felicitaciones: era una foto de Gaspar, el niño sampedrino con síndrome de Down que protagoniza una campaña publicitaria de una reconocida marca de indumentaria infantil.
El 21 de marzo fue el Día Mundial del Síndrome de Down, una jornada planteada por la ONU para promover la inclusión y el respeto por aquellos que presentan este trastorno genético. Quienes tienen síndrome de Down llevan tres cromosomas en el par 21, por eso se eligió esa fecha: 21/03.
En ese marco, Sin Galera y La Opinión difundieron la historia del modelo de la marca de ropa infantil G de B, de Gabriela de Bianchetti, que en una campaña que apunta a la inclusión tiene al niño sampedrino como estrella.
Gaspar es el menor de cuatro hermanos. Su mamá, Silvana Sánchez Barros, reveló cómo fue que su bebé llegó a ser la cara de la campaña otoño/invierno que la marca hará conocer en todo el país.
Silvana trabaja en un local de ropa que comercializa la marca G de B. La propia Gabriela Bianchetti ya había estado en San Pedro en varias oportunidades, incluso para donar ropa a chicos del barrio Los Cazadores, más conocido como La Tosquera.
Ese vínculo hizo que la titular de la marca de indumentaria supiera acerca del nacimiento de Gaspar en abril del año pasado, y de una cardiopatía que obligó a una intervención quirúrgica.
“Después de la operación, Gabriela me preguntó cómo había salido la cirugía, y yo le mando una foto y le digo ‘mirá si no podría ser tu modelo’. Ella me dijo: ‹¿En serio me lo decís?’”, contó la mamá de Gaspar. Semanas después viajaban a Capital Federal para la sesión de fotos.
Los papás de Gaspar se enteraron que sería un niño con síndrome de Down en el momento del parto. “No nos afectó. Era el cuarto y, la verdad, fue como la frutilla de la torta”, sostuvo Silvana.
“Tengo tres hijos más, y todos son blanco y negro. Al fin y al cabo somos todos diferentes, y todos tenemos un techo. La normalidad, en cierto punto, parece hasta mediocre, ¿no?”, se preguntó la mamá y aseguró: “Gaspar te hace vivir de otra manera. Mi papá decía que son ‘especiales’, y yo le decía que especiales son las pizzas”.