Cuarto intermedio en el conflicto en Celupaper, cuyos trabajadores sostienen que “es una mina de oro”
Lo aseguraron empleados de la fábrica este miércoles, mientras esperaban en las puertas de la planta la audiencia que se desarrollaba en Baradero y que pasó a cuarto intermedio hasta el jueves. El dueño de la empresa había advertido en un comunicado que la caída en la rentabilidad y los conflictos sindicales ponían en riesgo la continuidad. En Celupaper hay 167 empleados, que cobran un promedio de 20.000 pesos por mes.
Pasó a cuarto intermedio para este jueves la audiencia que se desarrollaba en Baradero en el marco del conflicto suscitaddo en la fábrica papelera local Celupaper, que la semana pasada suspendió a 19 trabajadores por 30 días y sin goce de sueldo a raíz de la caída de la producción originada por el incendio en una planta de Tacuarendí, provincia de Santa Fe.
La Opinión estuvo en las puertas de la fábrica, donde empleados y dirigentes del Sindicato de la Industria del Papel esperaban novedades sobre la reunión, luego de que fracasaran dos encuentros entre sus representantes y los de la empresa, que incluyeron una conciliación obligatoria no acatada por la compañía.
En un comunicado de prensa emitido ayer, el titular de la fábrica, Mario Speranza, sostuvo que la situación de la planta de Tacuarendí, la baja en la rentabilidad, la falta de competitividad en el mercado, el aumento de las tarifas de servicios y la presión sindical podría "derivar en un perjuicio mayor de incalculable proporción que es tener que cerrar la planta de San Pedro".
"Puede ser que haya dejado de invertir", dijeron trabajadores en la puerta de la fábrica, en cuyas paredes hay inscripciones con insultos a empleados jerárquicos. "No puede manejar a la gente como la maneja. Hace un par de meses que no hacemos horas extras", señalaron.
"Acá son 167 trabajadores, es la segunda papelera más importante de la ciudad. El promedio salarial es de 20.000 pesos al mes", explicaron los dirigentes sindicales. Sobre el comunicado de Speranza, acerca de que la empresa no tiene rentabilidad, su visión es contraria.
"Es todo mentira. Esto, como está trabajando, es una mina de oro", aseguró un empleado de la fábrica. "Si no fuera rentable no dejarían producto terminado que se moje, como hacen. No es que no tenga salida. Hay producto que llega de afuera, acá lo usan como logística", detalló.
"La producción se paró por el incendio (en Santa Fe), pero en una (línea) contínua que genera papel para esa empresa, después acá la producción siguió laburando, las máquinas que producen y las empaquetadoras trabajaron todas igual. Los camiones salen cargados siempre, producto hay", sostuvo otro empleado.
El Sindicato de la Industria del Papel mantiene, además, protestas en las plantas papeleras que la empresa posee en la localidad de Los Cardales, partido de Exaltación de la Cruz, y en Pacheco, partido de Tigre, como forma de protesta por la situación que atraviesan los trabajadores de la fábrica sampedrina.