Bonvissuto con futuro europeo
Tras 20 años como formador de valores, el entrenador de Náutico se incorporará al voley italiano desde el 20 de Agosto
A muchos le costó aceptarlo, a otros los conmovió. La noticia sobre la partida de Gustavo Bonvissuto hacia Italia tomó forma rápidamente y se transformó en el merecido premio a quien trabajó toda su vida por el voley con esmero y dedicación. No sólo formando jugadores sino también educándolos deportivamente.
El próximo lunes 20 de Agosto viajará hacia el viejo continente y el 27 se pondrá en marcha esta nueva experiencia, ese día arrancará la pretemporada. Se trata del Club Aito Sarno Voley, una institución radicada en la ciudad de Sarno, provincia de Salerno. Es un club dedicado exclusivamente a esta actividad y solo en la rama femenina.
Actualmente milita en la tercera división de la Liga Italiana y los objetivos trazados apuntan al ascenso. Es decir, que la tarea encomendada a Bonvissuto no será fácil, de todos modos se han incorporado varias jugadoras italianas y rusas con la finalidad de conformar un plantel competitivo y con aspiraciones. Además, tendrá la supervisión de las categorías Sub 14 y Sub 18, como para ir armando jugadoras y así abastecer el plantel mayor.
La notificación llegó a sus manos hace unas semanas tras una comunicación directa con el manager de la institución, Luigi Caruso. Años atrás, “Bonvi” había hecho contactos mediante un representante pero ese intento no prosperó. De todos modos quedaron los datos y así fue como se generó el acercamiento. Se hizo un llamado a concurso entre 13 entrenadores, de allí se seleccionó a tres y de estos últimos quedó el sampedrino.
En principio será un contrato de nueve meses (hasta el 31 de Mayo de 2008) y si las cosas salen como están planteadas se prolongará y se mejorará el contrato.
La ida de Bonvissuto deja un vacío enorme no sólo en el voley sampedrino sino también en toda la región, pues en base a resultados y la seriedad con que encaró cada una de sus tareas supo ganarse el reconocimiento de jugadores y clubes de todo el país.
Es por eso que no llama la atención que nada menos que el voley italiano haya puesto los ojos en él. Los éxitos lo avalan y sin llegar a integrar los clubes más importantes del país, llevó a Náutico San Pedro hasta los escalones más altos del voley nacional. Además consiguió varios logros cuando fue entrenador de la Asociación Sampedrina. Desde el mini voley hasta los mayores pasaron por sus manos y muchas veces con los resultados buscados.
Es que por aquellos tiempos, la modalidad de trabajo implementada por “Bonvi” era toda una novedad, siempre se lo indicó como un adelantado, pues implementó un proyecto que fue dando sus frutos y terminó de madurar cuando muchos de esos jugadores que fue llevando de su mano llegaron a la División de Honor (la categoría más importante del voley nacional).
“Creo que a todos los que trabajamos en esto nos gustaría alguna vez dirigir en una liga como la italiana”, dijo el entrenador. “Llega en el momento justo de mi carrera deportiva, porque he logrado la madurez necesaria como hacerle frente a semejante desafío”. “Dejo mucho. Dejo a mi familia, a los jugadores y a todos los equipos masculinos encabezando las posiciones del torneo nicoleño. Tampoco puedo olvidar la predisposición que tuvo en el club ante esta decisión, pues aceptaron mi determinación sin ninguna clase de problemas”, agregó Bonvissuto. “Espero que a la brevedad se pueda conseguir un reemplazante, debe ser alguien que conozca, que continúe con este proyecto ya que cabe la posibilidad que regrese en nueve meses”. “Han sido veinte años inolvidables, donde armamos un proyecto, juntamos a un grupo de muchachos bárbaros y tras pasar con éxito por todas las categorías llegamos a la división de honor tras arrancar en la última categoría de la Metropolitana”, sintetizó.
El domingo 19 será su último partido como entrenador de Náutico. Seguramente no pasará inadvertido, es que se va el formador de jugadores, el responsable de que el voley sampedrino se haya colocado en la sima del voley nacional, que es reconocido en todos lados. Sin presupuestos extraordinarios, solo con trabajo.
Un camino lleno de éxitos
No caben dudas que lo más importante que logró Gustavo Bonvissuto como entrenador de Náutico fue haber llegado a la División de Honor en la década del ’90.
En el año ’79 consiguió su primer título. Fue dirigiendo la selección de cadetes de la Asociación Sampedrina que obtuvo el campeonato provincial jugado en nuestra ciudad.
En 1982 condujo a la selección sampedrina que ganó el Campeonato Argentino de mini voley.
En el ’86 y ’87 dirigió al equipo que obtuvo los provinciales de cadetes jugado en San Pedro, mientras que en el ‘88 la selección sampedrina ganó el provincial de juveniles disputado en la ciudad de Mercedes.
Al año siguiente, fue campeón nacional juvenil en Neuquén con cinco jugadores sampedrinos integrando el plantel.
Entre los años ’91 y ’95 intervino en los Torneos de la Federación Metropolitana, en todas las divisiones arrancó desde la D, fue escalando hasta llegar a la Primera Metropolitana, consiguió el ascenso y se dio el gusto de jugar un año en la División de Honor, la máxima categoría del voley argentino por aquellos tiempos.
Por cuestiones de reglamentos absurdos debió dejar los campeonatos de la Metropolitana y buscar asilo en otras ciudades. En 2001 se incorporó a la Asociación Pergaminense. Allí fue campeón en el primer año y subcampeón en el segundo.
En el 2003 se afilió a la Asociación Nicoleña donde rápidamente se transformó en protagonista. Fue subcampeón en esa temporada y en la siguiente. En el 2005 se consagró campeón y en el 2006 fue segundo. Mientras tanto, en el año 2005 se adjudicó la Copa de Clubes de la Provincia de Buenos Aires que se jugó en Mar del Plata.