Archivaron la causa por la muerte de un niño en un hotel de la costa
A pocos días de haberse cumplido cuatro años de la trágica jornada, donde un niño de 6 años falleció ahogado en la pileta del complejo Howard Johnson Marinas, la Fiscalía General confirmó lo determinado por el Fiscal Marcelo Manso, quien había resuelto archivar la causa.
El domingo 25 de julio del año 2010, Tobías Fossa había llegado junto a su familia a disfrutar del Resort & Marinas Howard Johnson, un emprendimiento cinco estrellas ubicado sobre las costas de nuestra ciudad. Con seis años recién cumplidos, el chiquito quería divertirse después de la primera mitad del año en primaria.
Como toda familia que sale a vacacionar, llegó con la ilusión de disfrutar de un lugar muy promocionado y elegido por el turismo pero la misma noche en que llegaron la tragedia golpeó a esta familia oriunda de Lomas de Zamora.
La autopsia determinó que el niño murió ahogado y como toda causa traumática hubo pericias, fundamentos y análisis para procurar establecer por qué el pequeño Tobías cayó a la pileta.
Minutos trágicos
Aquella noche, la familia Fossa fue a cenar al restaurante Riviera, que se encuentra sobre el frente del complejo, en la avenida costanera. Tobías y Lucas –su hermanito de un año- –comieron primero; luego lo hicieron sus papás, Marcelo y Maricel.
Cuando terminó de cenar, Tobías, le pidió permiso a su padre para dirigirse a la habitación del bungalow que ocupaban en el lugar. El padre le dio la tarjeta de la puerta y hacia allí se dirigió.
Según declaró Marcelo Fossa, él mismo se quedó mirando a su hijo cómo caminaba por la calle interna del complejo hasta donde se encontraba “Vivi”, la chica que cuidaba de los menores. El hombre aseguró que observó cómo subía las escaleras, y regresó al restaurante.
Alrededor de media hora después, Maricel regresó a la habitación mientras el hombre completaba unos trámites en la administración del lugar. Según se pudo establecer, la mujer preguntó a la joven que cuidaba de sus hijos si Tobías estaba durmiendo y esta le respondió que no, que nunca había regresado.
A partir de allí comenzó el calvario para la familia Fossa. Comenzaron a buscarlo por todas partes hasta que advirtieron que tres personas rodeaban al menor desvanecido en el piso.
Muy poco había para hacer. El niño fue trasladado a la Guardia del Hospital, pero ya era tarde. El cuadro era irreversible y horas después se confirmó su fallecimiento.
Para la familia, “Tobías probó la tarjeta, no pudo abrir y quiso volver al restaurante”. Eso aseguró la mamá del niño.
“Ese día hacía un frío terrible y él estaba muy abrigado. Se habrá asustado y no pudo salir, tenía una campera que se hinchó con el agua e hizo mucho peso”, señaló la mujer y agregó: “De todas maneras, también nos dijeron que la campera lo mantuvo a flote pero al revés, boca abajo”.
El archivo
La causa estuvo a cargo del Fiscal Marcelo Manso, quien hace unos meses había determinado el archivo del expediente, ya que entendía que no había responsabilidad penal por parte de la empresa.
La Justicia tuvo en cuenta diversas cuestiones para arribar a la conclusión: el recorrido que efectuó el menor tanto cuando se dirigió a la habitación como cuando regresó; las características del lugar; las medidas de seguridad; y la responsabilidad de quienes estaban a su cuidado, ya que si bien la piscina no contaba con un cerco perimetral cercano, a su vez, desde el lugar donde se hospedaba el menor no había un acceso fácil a ella.
La familia pidió una revisión de lo resuelto por el Fiscal Manso pero semanas atrás la Fiscalía General confirmó la medida adoptada por el titular de la UFI 5 y finalmente el archivo de la causa quedó firme.