A 45 días de la pelea, “Sapi” Albacete habló con la hija de Bolaño y dijo que “está todo bien”
A un mes y medio de la discusión vecinal en el barrio 2 de Abril, que terminó con un Aníbal Bolañoñ en coma tras recibir una trompada de parte de José Luis Albacete, el "Sapi" llegó a la redacción de La Opinión para contar que habló con la hija del agredido y que está "arrepentido". "Yo no quiero más problemas, estoy arrepentido", dijo el hombre, que estuvo prófugo de la Justicia y que afronta una causa por lesiones a raíz del caso.
El sábado 3 de septiembre, una discusión vecinal en el barrio 2 de Abril terminó en una pelea a golpes de puño que derivó en la intenación del albañil Aníbal Bolaño, quien recibió una trompada por parte de José Luis "Sapi" Albacete y golpeó su cabeza contra el piso, lo que lo dejó en coma durante unos días, hasta que despertó y comenzó su recuperación.
Albacete, que estuvo prófugo de la Justicia durante casi una semana, enfrenta una causa por lesiones a raíz del caso. Este jueves llegó a la redacción de La Opinión para dar testimonio de lo que pasó ese día y contar que mantuvo una charla con la hija de Bolaño, en buenos términos, tras lo que "está todo bien" entre ambos.
"Lo que pasó ese día es que justo me levanté a las 11.00 ese día porque andaba atacado de la vesícula, y unos vecinos que viven a 60 metros de mi casa estaban insultando hacia mi casa y me levanté, había un problema con un nieto mío", contó
"Fui a arreglar los temas y terminé golpeado por el hijo de él, una trompada en la oreja, y me quiso agarrar el padre y yo con un golpe de puño le dí, sin querer, porque fue una piña como cualquiera, con la consecuencia de que se cayó al piso y golpeó la cabeza contra una piedra. en ningún momento fui a hacer problemas, yo fui a mediar", dijo Albacete sobre el hecho.
"Hablé con la policía y me quise entregar, pero no había denuncia. Al otro día me fui al campo a la casa de mi hijo, a ayudarle, y a eso de las 9.00 de la mañana llegó la policía, me reventaron la puerta, un allanamiento grandísimo", señaló.
El "Sapi" aseguró que nunca lo fueron a buscar y que mientras estuvo considerado prófugo por la Justicia estaba en la casa de su madre, a pocos metros de la suya. "No me quise entregar, pero me quedé ahí, no anduve disparando, hasta que me llegó el día de la operación", relató.
"Después me fueron a buscar a la clínica, me entregué, fui con ellos a la Comisaría y después tuve que ir a San Nicolás", recordó. "Lo que sucedió es que andaban unos vendedores de medias que querían comprar faso, porro, y mi nieto los llevó y ahí empezó el problema", dijo.
"Hablé con la hija de este hombre, que él quería hablar conmigo, pero la Fiscala me dijo que no me acerque. Pero en otra oportunidad vamos a hablar, la hija me dijo que él está arrepentido y yo también, en ningún momento lo quise lastimar", sostuvo Albacerte.
"Yo no quería problemas, simplemente fui a hablar. No va a ocurrir nada más, yo no quiero más problemas", dijo el conocido vecino del barrio 2 de Abril, quien señaló que la situación le generó problemas en su trabajo. "El jefe de Cablevisión de acá no me quiere más acá, me quieren mandar a Entre Ríos y yo no me quiero ir más de San Pedro y no sé, iré a renunciar", explicó.